Pedro cotiza al IMSS, pero, durante su vida laboral, ha retirado dinero de su cuenta individual en dos ocasiones.

Pedro sabe que por cada disposición sus semanas cotizadas han disminuido, pero no sabe cuántas, y ello le preocupa, pues pronto se retirará y quiere recibir la mejor pensión posible.

Pedro leyó en Mi Retiro y Pensión que puede recuperar las semanas disminuidas si devuelve el dinero retirado y para ello sólo tiene dos opciones: trabajar el tiempo equivalente a las semanas perdidas o devolver a la subcuenta de Retiro, Cesantía en Edad Avanzada y Vejez (RCV) el dinero dispuesto más los rendimientos que éste hubiera generado, si hubiera permanecido invertido.

Para obtener el dato de las semanas disminuidas se divide el saldo de la cuenta individual (sólo RCV) entre el número de semanas cotizadas que se tenía antes de hacer cada retiro y dará por resultado el importe acumulado por cada semana cotizada.

Luego, se divide el importe del ahorro dispuesto entre el importe acumulado por semana cotizada y nos dará por resultado el número de semanas disminuidas.

Finalmente, a la cantidad de semanas totales cotizadas se le restará el número de semanas retiradas y nos da el saldo de semanas cotizadas después de la disposición de recursos.

Si para la fecha en que Pedro hizo su último retiro tenía en RCV $450,000.00 y un mil semanas cotizadas, debemos hacer la siguiente división: $450,000 entre 1,000 semanas cotizadas, da por resultado $450.00, que es el importe acumulado por cada semana cotizada.

En la última disposición de recursos Pedro recibió de su Afore $51,750.00, entonces deberemos de hacer la siguiente división: $51,750 entre $450, y nos da por resultado 115 semanas a disminuir.

Finalmente, al total de semanas cotizadas antes de la disposición de recursos se le restan las semanas a disminuir y nos dará por resultado el nuevo número de semanas cotizadas, las que para este ejercicio serán de 1,000 menos 115 igual a 885 semanas cotizadas.

¿Por qué es importante cuidar o acrecentar el número de semanas cotizadas?

La respuesta es sencilla: en caso de obtener una pensión por los beneficios previstos en la Ley derogada, por cada 52 semanas cotizadas, en adición a las primeras 500, la cuantía adicional de la pensión se verá incrementada, llegando incluso a ser la parte más significativa del monto de la pensión a recibir.

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