Idéntico al argumento que sirvió para que ayer se ordenara la libertad del ex subprocurador especializado en combate a la delincuencia organizada, Noé Ramírez Mandujano, es el que aplica para que el ex subsecretario de la Defensa Nacional Tomás Ángeles Dauahare y coacusados sean excarcelados.

Jennifer es el mote con que la Procuraduría General de la República del calderonato camufló al delincuente a quien usó como testigo protegido para satisfacer apetitos políticos de ominosas purgas intestinas.

Como si una persona honrada lo requiriera, Ramírez Mandujano fue declarado “inocente” por la justicia federal, ya que se le sujetó a proceso con base en “pruebas” inventadas por quien en realidad se llama Roberto López Nájera (trabajaba para Édgar Valdez Villarreal, apodado La Barbie).

El juez Mauricio Fernández de la Mora le pidió al procurador Jesús Murillo Karam investigar a Jennifer, sobre la convicción de que este cuate se condujo con “falta de probidad” y porque “otras declaraciones de testigos se obtuvieron de manera ilegal…”