Como era de esperarse autoridades y expertos alertaron de que el uso del internet, principalmente las redes sociales, aumenta en época de vacaciones, y ante esto advierten de los peligros del excesivo uso de las tecnologías por parte de  jóvenes y niños. 

Eso se debe a diferentes causas, entre las que destaca la falta de comunicación con los hijos, de no dedicarles tiempo de calidad para conocer lo sienten, lo que piensan, lo que les molesta, sus ilusiones, etc.

Tampoco hay que olvidar que expertos en desarrollo urbano han señalado que ante la explosión demográfica los espacios (y la sensación del espacio) se han reducido para las personas. Prueba de ello son casas más pequeñas, que diversos estudios han demostrado que causan estrés, e incluso influyen en el ánimo de la gente. Todo esto influye en el uso que le damos a la tecnología.

Ante lo señalado se necesitan cada vez mayores espacios públicos como los campos deportivos, parques y áreas verdes, en los que las personas pueden liberarse un poco de su encierro. También la promoción de programas para fomentar la activación física y mental.

El correcto uso de la tecnología, como he señalado, siempre será de igual modo necesario. Hará falta platicar con los jóvenes que tienen que estar conscientes de que si exponen su cuerpo y datos muy personales en las redes, se vuelven vulnerables ante los demás, ante el internet.

Por otra parte, a los niños hay que enseñarles que los videojuegos no son el mundo real, y que no se pueden disfrutar con todos los sentidos.

MILENIO NOVEDADES señalaba ayer en una nota que ante esta situación algunas organizaciones realizarán pláticas para enseñar más sobre esto; espero que en realidad la información sea dirigida tanto a jóvenes como a personas adultas, quienes seguramente también pasarán cada vez más tiempo frente al internet.