Encuentros y desencuentros
Empecemos ¡HOY! a estimarnos, cuidarnos, querernos, apreciarnos y valorarnos para llenarnos de entusiasmo.
Los desencuentros son obstáculos que se pueden superar cuando se aprende a amar.- Anónimo
A veces nuestros miedos e inseguridades afectan y/o destruyen la relación de pareja. Puede aflorar una reacción negativa cuando uno de los dos progresa o se supera y se demerita y/o se descalifica su logro. También se destruye la relación cuando no se mide el desgaste excesivo en el trabajo, se altera el carácter y la convivencia armoniosa. No queda espacio para disfrutar juntos momentos de esparcimiento dentro o fuera de casa. El descanso y recreación son imprescindibles, inducen a una buena comunicación sin tensiones, para compartir sueños, planes y retomar la meta en común: mejorar cada día la relación, para seguir juntos.
Comentando los puntos de desencuentro, creo firmemente que en la pareja puede haber dos triunfadores y mutuamente alentarse, sentirse orgullosos y satisfechos de los logros individuales, lo que se traduce en realización personal y ahuyenta miedos, inseguridades y rivalidades. Cuando estamos contentos con nosotros mismos nos llenamos de entusiasmo, optimismo y autoestima para vivir bien y dar lo mejor de uno mismo al compañer@ de vida.
El trabajo es importante y proporciona satisfacción, alegría y dinero, sin embargo, siempre hay que revisar y equilibrar ya que puede absorber nuestra vida. Muchas veces para llegar rápido a metas de bienestar económico, se descuidan aspectos muy importantes como la salud mental, emocional y física. Es verdad el dicho: “No por mucho madrugar amanece más temprano”.
Las personas podemos “vivir” sin correr como si la vida fuera una carrera olímpica. Sabemos cuán frágiles son nuestras vidas y al auto-imponemos un ritmo agobiante, corremos detrás de la vida y dejamos pasar en blanco los momentos más significativos que nos ofrece. Empecemos ¡HOY! a estimarnos, cuidarnos, querernos, apreciarnos y valorarnos para llenarnos de entusiasmo, ilusionados, enamorados, interesados y satisfechos. Es una bendición gozar del amor y la presencia del compañer@; del soporte que nos brinda, del bienestar que nos proporciona y lo divertido que es compartir y convivir con él, con ella. Te aseguro que así se logra más. Se avanza con paso firme y productivo.
No te desgastes, ¡equilíbrate! Se inteligente y demuéstrate que “sí se puede, cuando se quiere” aprender a amarte y amar día a día, revisando tu escala de valores. Eso se llama, SABIDURÍA.
¡Ánimo!, hay que aprender a vivir.