¡Exitoso 2015!

Llega el fin de año y muchos hacen un ejercicio de reflexión sobre lo ocurrido a lo largo de 365 días...

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Llega el fin de año y muchos hacen un ejercicio de reflexión sobre lo ocurrido a lo largo de 365 días. Sin duda, 2014 ha representado un reto para la sociedad, el gobierno y el país en general. Desde hace un tiempo, he sostenido la idea de que las problemáticas que nos aquejan, son producto de la negación al cambio; se sigue con la idea de obtener resultados diferentes aplicando las mismas estrategias, cuando por sentido común esto debería ser distinto. 

Ejemplos muy claros sobran, principalmente, los de la clase política, que desde inicio de año, han tropezado una y otra vez, reforzando la idea social de que, el político, es sinónimo de corrupción y muchos otros vicios que demuestran su incapacidad para servir y cumplir con quienes confiaron en ellos en las urnas. Recuerdo las campañas encaminadas a beneficiar y proteger a la gente, que en la retórica sonaban muy serias, pero bastó el paso del tiempo para que se incumplieran; ahí están los famosos gasolinazos mensuales, que a partir de enero cambiarán, por un aumento del 3%, o el aumento a tarifas de transporte, o los ridículos aumentos al salario mínimo, solo por mencionar algunos, sino, la lista sería muy larga.

Por otra parte, desde septiembre, la imagen del país se ha visto afectada por la desaparición de estudiantes en el estado de Guerrero, a manos de delincuentes vinculados con políticos y policías, de los tres niveles de gobierno, y que a la fecha, pareciera que el problema está lejos de esclarecerse y seguirá afectando a un país que tiene todas las variables para ubicarse en posiciones más respetables en el plano internacional.

A pesar de todo lo que viene afectando la cotidianeidad social, se puede cambiar, pero antes se deben romper paradigmas, y ahí está el reto, “hay que fijarse en la ofensa, pero sólo para aprender”.

Para quien esto escribe, los cambios han formado parte de la vida, me han enseñado lo adaptables que podemos ser las personas, las decisiones que me he permitido tomar, me han beneficiado en la mayoría de las ocasiones, pero en otras no; pero la actitud que se tiene frente a los obstáculos hace la diferencia, aprender de lo que nos lastima, lo que nos duele y lo que nos frustra, para romper el paradigma, cuesta mucho, pero es posible.

El próximo año, sin duda habrá cambios, para todos los niveles; ya se prevén cambios (necesarios) en lo político; será el primer año con un nuevo horario en Quintana Roo, que le permitirá ser más competitivo frente a otros destinos de sol y playa;  habrá elecciones, en fin un año lleno de retos.

Quiero cerrar este texto, agradeciendo la confianza que desde abril de 2014 me ha brindado el periódico Novedades de Quintana Roo y el portal sipse.com, al publicar cada semana esta colaboración que se realiza desde la Ciudad de México, y por su puesto a los lectores.

Un exitoso 2015 a todos y,  como siempre digo con convicción y emoción, ¡Qué la pluma siga girando!

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