Fiesta sin máscaras

El fiesta 'privada' de los diputados panistas reveló una gran fisura entre los dichos y los hechos, así que con su PAN se lo coman...

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Una vez más, lo que todos los mexicanos se imaginan, fue ampliamente difundido en un video. Alberto Villarreal, coordinador de la bancada del PAN en San Lázaro, junto con otros diputados y funcionarios del mismo partido aparecen festejando en una mansión, habiendo visiblemente ingerido altas dosis de alcohol y alternando con muchachas de vestimenta más bien ligera, presumiblemente sexoservidoras.

Las escenas parecen salidas de una mala película mexicana o, por momentos, de una telenovela colombiana de narcos, salvo que los diálogos son particularmente malos y, hay que decirlo, no se aprecian ni drogas ilegales ni armas.

En principio pareciera tratarse de excesos privados, que por tanto no tendrían que ser materia de opinión pública. En este sentido fueron las primeras declaraciones del ahora relevado coordinador, al afirmar que los hechos fueron en horas inhábiles.

La respuesta no satisfizo, al menos, al presidente nacional del PAN, quien rápidamente aceptó una forzada renuncia de Villarreal a la conducción de la diputación panista.

La fiesta llama la atención sobre distintos puntos que merecen debate público y hasta político, como la prostitución, el machismo o los excesos de los políticos; pero también revela la condición particular del PAN frente a hechos de esta naturaleza.

La contratación de sexoservidoras y el consumo desmedido de alcohol resulta muy contradictorio con las posturas públicas de Acción Nacional sobre el sexo, el matrimonio, la familia y la dignidad humana. Mucho más de lo que resultaría en otros partidos.

Desde su fundación, el PAN ha asumido las posiciones más conservadoras en relación con el cuerpo y la sexualidad. Sus gobernantes han prohibido las minifaldas, los desnudos -incluso en el arte-, y han promovido la penalización con cárcel del aborto, aún tratándose de niñas violadas. Han proscrito la prostitución, perseguido a las sexoservidoras y penalizado a sus clientes. 

Al inicio de la pandemia del sida, el PAN se resistió a la promoción del uso del condón. En su defensa de la familia y la dignidad humana, se ha opuesto a cualquier cosa que pueda interpretarse como permisiva con las relaciones sexuales fuera del matrimonio.
Amén de muchas otras cosas, el video en circulación exhibe sin matices la gran hipocresía del panismo contemporáneo.

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