Gerónimo Baqueiro Fóster no sólo es el más importante investigador de la música del sureste de México desde sus orígenes hasta 1967, en que fallece, sino que es fuente de inspiración de nuestra generación de investigadores y musicólogos yucatecos que continúan su labor y fundan, en  julio de 2002, el Centro Regional de Investigación, Documentación y Difusión  Musical que lleva su ilustre nombre.

Ellos son Enrique Martín Briceño, actual director general de la Escuela Superior de Artes de Yucatán, y Álvaro Vega Díaz, director de la Licenciatura en Artes Musicales de la ESAY.

Me cabe el honor de ser investigador de este centro de preservación musical desde septiembre de 2004, y de ser director del mismo desde octubre de 2007. Unos años después, solicité la donación de la flauta predilecta del maestro Baqueiro Fóster a su cuñada María de los Angeles Ruiz García de Rivero, quien  la tenía resguardada, para preservarla en el fondo reservado de nuestro centro de trabajo. Donación que se concretó el pasado mes de octubre en la Ciudad de México cuando la Sociedad Artística Ricardo Palmerín, que presido, le otorgó al maestro Baqueiro Fóster, Post Mórtem, la Medalla Ricardo Palmerín. 

Baqueiro Fóster nació en Hopelchén, Campeche, el 7 de enero de 1898,  y murió en la capital del país el 29 de mayo de 1967. Fue musicólogo y compositor. En su pueblo natal estudió solfeo.

En Mérida  tomó lecciones de flauta con Luis Ontiveros y de instrumentos de boquilla circular con Antonio Hernández Frías, quien también le dio clases de violín, lo mismo que Asunción Sauri. Fue músico de la Banda del Estado.

En 1921, viajó a  México para inscribirse en el Conservatorio Nacional. Allí tomó clases de oboe y se incorporó a la orquesta del plantel. En 1928, formó parte de la Orquesta Sinfónica de México e ingresó al Conservatorio como catedrático de historia de la música. Formó parte de la Orquesta Sinfónica de José F. Vázquez y de la Orquesta Alemana de México. Fue director de orquesta en XEX y XEQ y asesor musical del programa La Hora Nacional. En 1940, fue socio fundador del Instituto de Musicología y Folklore. Escribió numerosos trabajos.

Es autor del libro La canción popular de Yucatán (1850-1950), uno de los más documentados ensayos sobre la trova yucateca.