La historia escrita de los gobernantes

Pakal y su hijo Kan Balam, que fueron los señores de Palenque. En esta próspera ciudad los gobernantes prefirieron registrar sus historias en las paredes de estuco de los templos.

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Quedó escrito en los dinteles, que el señor  Itzamnaaj Balam II gobernó Yaxchilán entre los años 681 y 742 dC. Era considerado como un gran guerrero y protector de la ciudad, su gobierno fue próspero. 

Las fechas que quedaron registradas en las inscripciones indican que vivió hasta los noventa años. Este soberano tenía varias esposas, pero entre todas ellas la señora Kabal Xook fue las más importante, ya que a ella se dedicó uno de los mejores templos de Yaxchilán, y para decorar su interior fue necesario traer a magníficos escultores  de otras ciudades.

En este suntuoso santuario fue enterrada la señora Kabal Xook  acompañada con una impresionante ofrenda compuesta de más de veinte mil navajas de obsidiana.

Otra historia fue la de Pakal y su hijo Kan Balam, que fueron los señores de Palenque. En esta próspera ciudad los gobernantes prefirieron registrar sus historias en las paredes de estuco  de los templos y en algunos objetos de piedra, pero no en estelas.

Quedó representado en el estuco modelado en las paredes que Kinich Janaab Pakal o más bien Pakal el Grande  recibió el poder de manos de su madre, porque, al parecer, la madre Sak Kuk había asumido el poder ante la falta de sucesores varones, ya que el último murió en una feroz guerra contra el rey de Calakmul.

La señora Sak Kuk, después de gobernar tres años, dejó el poder en manos de su hijo cuando éste sólo tenía doce años.

Pakal logró una gran prosperidad y alcanzó la riqueza suficiente para construir palacios y un mausoleo monumental para su viaje a Xibalbá: el Templo de las Inscripciones. Kinich Kan Balam II también logró un enorme poderío e igualó a su padre al construir  el templo de la Cruz, el Templo de la Cruz Foliada y el Templo del Sol.

Contemporáneo de Pakal el Grande lo fueron Yuknoom-Cabeza y Yuknoom el Grande, señores de Calakmul.

Esta fue la ciudad más belicosa y quedó grabado en las estelas que cuando la ciudad de El Naranjo, en el Petén Guatemalteco, quiso independizarse, entonces, el ejército de Calakmul sometió al rey y Yuknoom lo asesinó personalmente.

En el relato se usa el verbo kuxaj, mencionando lo que Yuknoom le hizo a su adversario y se traduce como: se lo comió. Yuknoom el Grande luchó contra Tikal, apoyando a otros pueblos del reino.

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