'Hoy, tu padre quiere hablarte'

Y tú no has tenido tiempo de escucharlo; tal vez cuando quieras escucharlo ya sea demasiado tarde...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Hoy se festeja el Día del Padre y qué bueno es hacer un autoexamen de conciencia para ver qué tanto amor, respeto y dedicación estamos dando a nuestro padre. 

"Una de las personas que más quiero y menos conozco es mi padre”. Qué fuerte, pero qué cierta es esta frase, que en esta fecha vale la pena reflexionar.

Tal vez hoy tu padre quiera hablar contigo y tú no has tenido tiempo de escucharlo; tal vez cuando quieras escucharlo ya sea demasiado tarde, porque la muerte no espera, y hoy, no mañana, podríamos darnos tiempo de visitarlo.

Hoy, tu padre quiere decirte tantas cosas y tú no tienes tiempo. Tal vez a través de mis letras lo escuches y lo comprendas cuando él te diga: 

“Gracias hijo porque comprendes que mi paso es lento y los años me han ido quitando esa agilidad con la que yo te llevaba al parque; ahora te doy gracias, pues tú eres el que me llevas a dar una vuelta y me sacas de mi encierro emocional”.

“Gracias hijo, porque sabes escucharme y entiendes que mis oídos no son como antes. Yo me esfuerzo en escuchar tus palabras, las cuales son alegría a mi espíritu y le dan fortaleza a mi mente cuando te tengo ante mi presencia y escucho tu voz”.

“Gracias hijo que entiendes que mis ojos ya no brillan y mi mente es lenta. Porque para verte con sentirte es suficiente; y perdóname cuando repito la misma pregunta, gracias por no molestarte y darme tiempo.... tiempo para poder amarte”.

“Gracias hijo, cuando me estimulas a levantarme de la cama, la cual cada día me es más difícil dejar, pero con tu visita y tu sonrisa iluminas mi vida, pues deseo verte, tocarte y sentirte, así como cuando eras niño, desearía que sigas siendo mío”.

“Y querido hijo, perdóname si te canso con mis preguntas, que por enésima vez repito; es mi mente que ya no es ágil y mis pensamientos me hacen llorar; perdona hijo mis lágrimas que son pedazos de mi corazón, las cuales te quiero dejar para que no me olvides”.

“Gracias hijo por escucharme en el teléfono al dejar que converse contigo. Sé que mi tema es cansado, pero entiende, en la casa estoy solo y aislado y es difícil que pueda darte la última noticia o informarte de lo que tú deseas escuchar. Sólo deseo compartir contigo mi soledad y expresarte mi amor”.

“Gracias hijo por visitarme y compartir conmigo esos minutos en los que me alientas. Y gracias por aceptarme así como soy y respetarme. Sé que los años me han hecho de mal carácter y mi trato es difícil; espero que con tu amor lo comprendas, deseo ser útil y eso lo siento cuando me pides un consejo o solicitas mi opinión”.

“Gracias hijo por ayudarme en mi peregrinar hacia Dios, dándome aliento, ánimo, estímulo y amor incondicional. Cada día me siento mas cerca a Dios y para mi el cielo es ....¡un lugar donde los hijos visitan a sus padres!”.

“Y para no cansarte hijo, gracias por tu amor, pues por tu amor la vida es bella y sé que vivo; con tu amor no envejeceré nunca. Para mí, tu amor es la llama que me mantiene vivo y cuando cese, mi vida se empezará a apagar”.

Lo más leído

skeleton





skeleton