Algunos investigadores de las Ciencias Sociales y Humanidades están muy preocupados en demostrar que sus áreas de estudio son tan válidas y comprobables como las Ciencias Exactas y Ciencias Naturales. En esa pretensión de absoluta objetividad, puede dejarse de lado que lo analizado pertenece a algo mayor, cuya complejidad trasciende esquematizaciones o las usuales metáforas-conceptuales que simplifican lo mayúsculo. 

Ese es el sabor de boca que me ha dejado leer a Gayatri Chakravorty Spivak, pensadora nacida en Calcuta y hoy catedrática de la Universidad de Columbia. En su artículo '¿Puede hablar el sujeto subalterno?', menciona los márgenes habitados por aquellos que no tienen voz ante quien teoriza sobre ellos. Por esos mismos días volví al documental Nostalgia de la luz del director chileno Patricio Guzmán. Cuando vi la película por primera vez ya se había marchado de Mérida  Brad Epps, investigador de la Universidad de Cambridge, quien en su visita dio una conferencia sobre Guzmán y su obra fílmica. En nuestras pláticas sobre calles bañadas de sol emergió el tema de la distancia del investigador. 

Nostalgia de la luz: el escenario es el desierto de Atacama. Ahí los astrónomos trabajan las estrellas desde la claridad que ese cielo ofrece. Ahí los arqueólogos examinan los rastros y pasos de los que estuvieron. El documental plantea que ambos trabajan con el pasado. Esa imagen, el cuerpo celeste observado en el telescopio, llega siempre en pasado a los astrónomos. El presente no existe, siempre estamos viviendo en pasado. Son arqueólogos también. Pero no son los únicos que se mueven en ese tiempo. Duermen tranquilos, miran siempre hacia arriba o abajo, arqueólogos y astrónomos, en su búsqueda del pasado. ¿Pero miran hacia los lados?, es la pregunta de Guzmán. En Atacama mujeres buscan los cuerpos de sus familiares desaparecidos durante la dictadura de Pinochet. 

Ojalá esos enormes telescopios pudieran buscarlos en el desierto, comenta una de las mujeres. El director chileno con entrevistas logra cruzar esas búsquedas del pasado. Es un compromiso ético ver hacia ese pasado también, afirman los científicos chilenos. La Nostalgia concluye con los astrónomos y mujeres operando un telescopio.

Brad expuso esa distancia sin sospechar que tendría un vaivén con ella. Los tópicos en su conferencia fueron: desaparecidos, distancia y fotografías. Cuando salió encontró en unas mamparas las 43 fotografías de los estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa  colocadas por otros estudiantes. Fue una distancia que se acortó en otro contexto a este notable investigador.