La sazón de internet

Dicen que la victoria tiene tantos amigos como enemigos...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Dicen que la victoria tiene tantos amigos como enemigos, y en estos tiempos de redes sociales, lo que abunda son razones para caer en ambos extremos de la balanza, aún a riesgo de perder la objetividad, y en muchos casos, el piso. 

Uno de deportes más apreciados en la web es amarrar navajas, la vieja e insana costumbre de crear chismes para sazonar una noticia, idea o rumor, todo con la única misión de hacerse el interesante, y gracias a las redes sociales, eso de “agregar de nuestra cosecha” a los rumores de la web se ha convertido en el ajonjolí de todos los moles. 

Esto deja un sabor amargo, pero que se disfruta como el chocolate –el de verdad, no el europeo-, y aunque no tenga realmente mayor utilidad que entrarle al borlote, evidencia la falta de cuidado que los usuarios tienen en los debates de redes sociales, y en especial, la hipócrita actitud que tomamos cuando no sale premiado nuestro platillo favorito. 

El domingo pasado la yucateca @Alana_MCJr ganó el concurso MasterChef Junior México, y ni bien se transmitió la celebración, ya la red de redes había pescado cientos, sino miles de comentarios de contrariados seguidores de @Yoel_MCJr y @Efanyz_MCJr, alegando desde la supuesta altanería de la ganadora, al hecho que nunca se amarró el cabello, o que no usara gorrito o probara su comida… y así hasta grados insospechados como calificarla como yucateca “de la casta divina” o pariente de la presentadora. 

Tan sin sentido como se lee, así o peor estuvo en su momento en Twitter y Facebook, máxime al notar que esa actitud de los usuarios es la misma que emplean para tirarle con todo al gasolinazo, a cualquier pifia del presidente, clamar por los desaparecidos en Ayotzinapa o quejarse con cada capítulo de #AcapulcoShore: la vaguedad de argumentos, el chisme, las ganas de tirarle al que triunfa (aunque sea en un concurso) y olvidar sin más que, primero, es un concurso; y segundo, uno hecho para niños. 

Tal parece que los usuarios de redes sociales no aprenden o no se les da en gana enfocar sus energías mentales en algo más constructivo que caer en la indolencia, y cada “hashtag” que nace, reafirma la imagen sombría, tal vez inculta, pero por demás decepcionante de nosotros mismos en la web. Esto no tiene que ver con el tema del concurso de cocina en sí mismo: busquemos las reacciones al conflicto magisterial en Oaxaca y encontraremos la misma necesidad de amarrar navajas, de amargar la discusión con insulsas y caducas consignas que alejan, al menos de las redes, la razones del complejo problema que es educar a uno de los estados más pobres del país. 

Para los usuarios que como hordas invaden las tendencias sobre este tema, sólo hay dos sopas: apoyar al gobierno o al magisterio disidente. No hay medias tintas, aunque internet sea el espacio perfecto para la concordia y el entendimiento, preferimos en este y otros temas, seguir con la costumbre de ponerle demasiado picante a la comida, pues si no arde –dicen- no tiene sabor, aunque terminen por ocultar el sazón verdadero de la noticia. 

En 140 caracteres 

Cumplimos 4 años en @NovedadesQRoo: agradezco a mis compañeros por su enseñanza diaria y la oportunidad de plasmar mis ideas cada semana.

Lo más leído

skeleton





skeleton