Una larga visita fue la que el Papa Francisco realizó por varios estados del país. Fueron horas en las que millones de personas vivieron diferentes experiencias, algunas positivas, pero la mayoría no tanto, debido a diferentes variables.

Para quienes no hubo muchos inconvenientes, como sucede en estos casos, fue para los miembros  de la “casta política mexicana”. Gobernadores y sus familias, gente del gobierno federal y empresarios, no tuvieron que padecer largas horas sin comer, sin beber agua, como los miles que acudían a los eventos. 

El primero en Palacio Nacional, ya dejaba ver quienes estarían en los lugares de privilegio, todo el gabinete de la administración federal, y los más prominentes empresarios, contemplados en los sitios más cercanos al Papa Francisco. El caso de la Senadora por Nuevo León, Ivonne Álvarez, es espacial, ya que en primer lugar acudió con toda la familia a hizo todo lo posible para que su hijo “pato”, tuviera un momento cercano con el Papa, simplemente obligó al hijo a saltar la valla de seguridad, rompiendo el estricto cerco que rodea al líder de la Iglesia Católica.

Otro caso muy sonado fue el del Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, quien tuvo que identificarse ante los miembros del Estado Mayor Presidencial  para poder ingresar al evento programado en el zócalo capitalino, una vez pasado el mal rato, Mancera, aprovecho para tomarse una “selfie” con el Papa.

Tanto en el Estado de México, como en Chiapas, Michoacán y Ciudad Juárez, desfilaron toda clase de políticos y personajes polémicos, destacaron el ex Presidente Felipe Calderón en Michoacán, quien aprovecho también para tomarse fotos con cada persona que se lo solicitaba; en el mismo evento de Morelia, pudo verse al hijo del Ex Gobernador Fausto Vallejo, Rodrigo Vallejo, quien recordemos está en libertad bajo proceso por presuntos vínculos con Servando Gómez “La Tuta”, líder de uno de los grupos de la delincuencia organizada asentados en esa región del país. 

Como se los comentaba, mientras miles de personas pasaron incomodidades, hubo quienes sólo por ser parte del sistema político, tuvieron el privilegio de convivir o estar cerca del Papa Francisco. 

Un dato importante para la Ciudad de México, es que con la visita del Papa, la derrama económica se ha calculado como muy positiva. En la capital del país este cálculo se ubica entre los 800 y 900 millones de pesos. Aunado a esto la marca México se ha visto beneficiada y esto se reflejará en los millones de visitantes que se espera reciba el país en este año, que cabe hacer mención ha sido considerado el año de la Ciudad de México, ya que según estimaciones de medios norteamericanos, será la mejor ciudad en el mundo para visitar.

Así que fueron días intensos para el país con la visita del Papa Francisco, donde queda claro que es positiva por el impacto que genera a nivel mundial; pero se demuestra una vez más, que a la “casta política” no le gusta estar junto a los ciudadanos y sólo se acerca cuando se aproximan las  elecciones. ¡Que la pluma siga girando!