Las tribulaciones de un mexicano en China

¿Se acuerda usted de aquello de que se cobró a lo chino como sinónimo de que se cobró a la mala o me engañó como a un chino? Pues eso es un retrato de lo que es vivir aquí.

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Aquí, viendo la paja en el ojo ajeno. Florestán

Las relaciones con China nunca han sido fáciles para México.

No se trata de remontarse a la legendaria Nao, ni a la China poblana ni a los días en que por aquellas tierras circulaban monedas de plata acuñadas en México. Tampoco a la era de Mao cuando, hace 41 años, el entonces presidente Echeverría (1970-76) estableció relaciones con la República Popular China.
Me refiero a lo que ha corrido desde aquel 14 de febrero de 1972 a la actualidad, donde ha privado el embudo chino.

A China volverían, después de Echeverría, todos los presidentes de México para comprobar su transformación política y el nacimiento de una potencia económica sin paralelo.

Y todos ellos hablaron de alianzas estratégicas, firmaron convenios y protocolos que de muy poco sirvieron: hoy que China tiene una inversión directa en el mundo que supera los 350 mil millones de dólares, la que tiene en México apenas llega a 300, es decir, nada. Y en Comercio Exterior, nos venden 60 mil millones de dólares y les vendemos apenas cinco mil, menos de 10 por ciento.

Así acabaron discursos, acuerdos y buenas intenciones de China a lo largo de los años y de los presidentes.

En este escenario, termina hoy su visita a México el presidente Xi Jinping, con quien el presidente Enrique Peña Nieto busca iniciar, otra vez, una relación a la altura de los ofrecimientos y las posibilidades reales de los dos países, aunque siempre sujetas a sus caprichos, como cuando el gobierno chino canceló las exportaciones de cerdo mexicano en represalia a la visita a nuestro país del Dalái Lama.

Pero tampoco se puede entender un relanzamiento económico de México sin China. Vamos a ver cuál es el precio.

Recuerdo, no hace mucho, las tribulaciones de los mexicanos en China, una pequeña colonia aislada, una comunidad invisible: ¿Se acuerda usted de aquello de que se cobró a lo chino como sinónimo de que se cobró a la mala o me engañó como a un chino? Pues eso es un retrato de lo que es vivir aquí.

retales
1. VIAJE.
Fue el diputado del PAN Ricardo Anaya quien, como vicepresidente de la Comisión Permanente, recibió al presidente Jinping en la sesión solemne de ayer. Ernesto Cordero está en una gira por Alemania;
2. PASADO. En el caso reapareció ¡Roberto Madrazo! para denunciarlo por ¡corrupto! Y exigir su salida del PRI. Eso sí ya debe haber calentado al desaparecido ex gobernador tabasqueño. ¡Mira que Madrazo!; y
3. IMPUNIDAD. Se cumplieron cuatro años de la peor tragedia infantil en México, los 49 niños muertos en la guardería ABC de Hermosillo. Y lo indignante sigue siendo la impunidad. Y la preocupación de los responsables solo de defenderse en lugar de renunciar por un imperativo moral. 
Nos vemos mañana, pero en privado

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