Nos encontramos ya en las semifinales de la Liga Mx y los cuatro mejores equipos de la fase regular están compitiendo por un puesto en la final.

Monterrey, Pachuca, América y León, ese es el orden que muchos aficionados darían al ser preguntados acerca de quién es el favorito para llevarse el título; sin embargo, a mi parecer, el orden correcto debería ser el siguiente: Monterrey, León, América y Pachuca.

Bastaría voltear a ver la tabla para decirme: “Estás loco”, pero yo me decanto por una oncena que es la menos nombrada de todas: la esmeralda.

En su enfrentamiento con Pachuca tiene la ventaja de presumir que en la última liguilla en la que se encontraron la escuadra guanajuatense levantó el trofeo de bicampeón, todavía con Gustavo Matosas al frente.

De igual manera, en los cuartos de final, el conjunto de la fiera venció de manera contundente al sorpresivo Monarcas Morelia, mientras que los Tuzos avanzaron pidiendo la hora y con más de una atajada en la línea de Oscar Pérez.

León ha sabido recomponerse de las bajas del “Gullit” Peña y su entrenador Juan Antonio Pizzi. Luis Fernando Tena y el canterano Aldo Rocha los suplieron de forma óptima y, además, encuentra en Mauro Boselli uno de los delanteros más letales del futbol de nuestro país en la última época, con 69 goles en 113 partidos desde que pisó tierras mexicanas.

En la media cancha, silencioso pero siempre efectivo, José Juan “Gallito” Vázquez cumple siempre su labor de repartidor y da oxígeno a la defensiva leonesa; por las bandas, Elías Hernández y Darío Burbano se consolidaron como una opción siempre peligrosa, y Luis Montes nuevamente recuperó esa aura de la figura del diez que perdió desde aquella estrepitosa lesión que lo dejó fuera del Mundial de Brasil 2014.

En la zaga, Guillermo Burdisso y Diego Novaretti dan seguridad en la central y son siempre una opción de peligro a balón parado, del mismo modo, por las laterales, Efraín Velarde y Fernando Navarro tomaron un segundo aire en su carreras y aportan tanto al momento de defender como al de atacar.

Finalmente, en el arco tienen a William Yarbrough, que si bien ha tenido altibajos en su carrera, ya lleva la experiencia de dos campeonatos como titular bajo los tres palos, además de haber debutado en la selección mayor de Estados Unidos.

Todos ellos bajo el mando del entrenador que fue campeón olímpico en 2012 hacen de León un favorito al título.