Sí, es el nombre de una película que llevó al estrellato a Clint Eastwood, pero no es su película la que nos ocupa en esta ocasión.

Me referiré (otra vez) a la Reforma Educativa de la que MILENIO NOVEDADES expuso en páginas centrales ayer que Yucatán se incorpora a nueva política federal de mejorar la calidad en todo México.

Comencemos con lo bueno: que los directores de escuelas ya no tengan que esperar hasta un año para que sus peticiones de mejoras escolares sean atendidas. Qué bueno que esta petición ya no tenga que pasar por escrito hasta por el conserje para que puede ser atendida.

Y qué bueno que haya una mira concreta de eliminar el cobro de cuotas escolares.

Lo malo. Lo malo es que aún no se resuelva cómo atender vacíos existenciales, apatías y razones de ser de los alumnos, dirigidos principalmente a que se conviertan en trabajadores competitivos, pero aún sin el toque humano, como explicó el docente Prudenciano Moreno Moreno de la Univerrsidad Pedagógica Nacional.

Y lo feo, pero muy feo es el reaccionar de varios maestros (o al menos eso dicen) que paralizan las actividades de terceros y aunque este paisaje es común en otros estados, al menos en Yucatán los maestros apuestan por otras vías de “lucha”, con todo respeto maestros, eso es algo bastante desagradable…