En las  representaciones federales se podrá observar con claridad cómo se van a armar los diversos grupos del PRI. Son cuatro los políticos que tienen influencia en el Estado e incluso que pueden cambiar el destino de algunos: el primero es el gobernador Rolando Zapata Bello, luego el secretario de la Reforma Agraria,  Jorge Carlos Ramírez Marín; el senador Emilio Gamboa Patrón y la ex gobernadora Ivonne Aracely Ortega Pacheco.

En las delegaciones federales cada una de las cabezas de grupo intentará colocar al mayor número de sus operadores políticos. Las ventajas son el manejo de los recursos, pactar con grupos empresariales, tener movilidad en todo el Estado y poder realizar alianzas con miras a futuras elecciones. El reparto de las delegaciones será un mensaje del centro para ver quién tiene más fuerza  ante el poder federal.

La joya de la corona para los priistas es la delegación de la Secretaría de Desarrollo Social (Sedesol) que por su naturaleza es la que más trabajo político puede realizar, ya que sus programas hacen que el encargado tenga contacto directo con la población y los grupos organizados, pero, además, es la que puede hacer que su encargado sea un aspirante natural al gobierno del estado o una senaduría.

El grupo de la secretaria general del PRI intenta que su cuñado, el ex diputado local Cornelio Aguilar Puc, sea el encargado de Sedesol, ya que es uno de los hombres en que puede confiar la ex gobernadora. Si bien es cierto que no le fue bien en el reparto de cargos federales de primer nivel a la ex mandataria, al menos integrantes de su grupo político controlan varios espacios de poder como es el Congreso del Estado.

El gobernador tiene que mandar el mensaje de que es el jefe político en el Estado y que puede conciliar con todas las fuerzas. Este grupo desea que uno de los encargados en Sedesol sea el ex diputado federal y ex presidente de la Comisión de Desarrollo Social en la Cámara, Liborio Vidal Aguilar.

Nadie duda que Pablo Gamboa Mier, actual encargado de la Comey, cuenta con el respaldo del gobierno federal para cualquier delegación, puede ser Sedesol o la SCT, ya que por su formación es bien visto en los principales grupos empresariales yucatecos y en una delegación podrá empezar a tener contacto con la población rural que no lo conoce. La Sedesol puede ser un buen escaparate para prepararlo dentro de seis años para ser el candidato del PRI al gobierno del Estado. Este grupo, de Emilio Gamboa, cuenta con un operador político que da votos y es conocido dentro de la estructura del PRI, José Blanco Pajón.

Jorge Carlos Ramírez Marín tiene como punta de lanza a Luis Borja, encargado del Instituto de Competitividad. Este joven puede darle mucho a su grupo. Otro elemento afín al grupo del próximo secretario de Desarrollo Rural  es el Dr. Ariel Castillo, a quien se le ve en una delegación relacionada con el sector salud.