Los días 25 y 26 se llevó a cabo el Sexto Foro de Marketing y Ventas de la Asociación de Clubes Vacacionales de Quintana Roo (Acluvaq) en el Cancún Center, con la presencia de conferencistas reconocidos internacionalmente, tanto por su trayectoria empresarial, como por su éxito profesional. Fue un encuentro donde se brindó herramientas y conocimientos completos relacionados principalmente con el motor del progreso local: el turismo.

Anteriormente, Miriam Cortés Franco, presidenta ejecutiva de la Asociación desde 1993, calificó al foro “el más importante del país”, porque los adheridos a la Acluvaq generan el 40% de impuesto al hospedaje, y por el sector, tanto en Cancún como en Riviera Maya, se capta el 47% de los derechos de actividad no remunerada (antes llamados derechos de no inmigrantes). Además, casi el 50% de los visitantes internacionales que ingresan por el aeropuerto de Cancún son de tiempos compartidos. Y es que lo de Quintana Roo no se ve en otros estados.

Este año el eje temático fue la persuasión, contada en vivencias de empresarios, expertos en marketing, agentes ventas y un especialista en lenguaje corporal; todo ello, con el fin de asimilar el concepto y aplicarlo para fortalecer los equipos cuya misión es convencer a un prospecto que vacaciona más, deja mayor derrama y se hospeda más tiempo que un paseante tradicional.

Me agradó la disertación de Enrique Gómez Gordillo Ruelas, asesor con más de 25 años de experiencia en la formación de trabajadores de más de 60 giros, quien expuso “11 claves del marketing para seducir a nuevos clientes”. Una frase suya fue contundente y resumió la dinámica: “primero te ‘vendes’ como profesional, luego a tu empresa y después el producto; no al revés, como es la costumbre”.

Trasladar esa idea a la arena política electoral debido a la coyuntura, es tentador. Porque muchos candidatos son desconocidos, o no tienen presencia, ni prestigio, ni méritos, por lo que “venderse” como opción es prácticamente imposible. Les resulta más fácil “vender” el partido o la coalición que les cobija, después alguna propuesta atractiva, pero nunca convencen por sí solos. Su fracaso, pues, es inminente, pues la lógica planteada por el expositor es a la inversa.

El marketing político pareciera cobrar mayor peso en dimensiones que se entrelazan indudablemente en Quintana Roo: política, turismo y negocios. En el ámbito político se invierte más en contratar a prestigiosos “gurús” de la mercadotecnia que ayuden a determinado candidato a posicionarse como la mejor opción de cara a los electores. Por su parte, el marketing cada vez pone a merced de los partidos herramientas más sofisticadas que les permitan lograr persuasión.

Pero las cosas han cambiado mucho: los consumidores de la política (los electores) ya no son engañados; internet y las redes sociales han revolucionado las formas porque mediante ellas se accede a información antes escondida, manipulada o simplemente diferente. En este sentido, hay otras verdades, es obligatorio sorprender y es preciso salir del “envoltorio” para convencer.

El Sexto Foro se prestó para reflexionar más allá del turismo y los negocios, convirtiéndose en una plataforma para desarrollar múltiples estrategias.

Desorbitado

Finalmente el Instituto Electoral confirmó la realización de sólo un debate, de los 17 programados hace algunas semanas: será mañana sábado entre los cinco que aspiran a gobernador. ¿A qué se debió? A las mañas de los estrategas de ciertos punteros, la mala organización del árbitro electoral y los berrinches de algunos contendientes.

El ejercicio era una buena tribuna y una forma directa de llegar a ciudadanos. Lamentable.