Mérida y su transporte de pasajeros

Es inevitable que el número de automóviles continúe creciendo, por lo que el transporte público debe modernizarse.

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Uno de los problemas que origina un crecimiento vehicular como el nuestro es que la ciudad se va separando en dos estratos: una población descentralizada y motorizada, y una población densa, marginada y no motorizada, división que aleja cada vez más a la población de bajos ingresos de las oportunidades de empleo, lo que no es transitorio.

Una herramienta para encarar este problema es la mejora del sistema de transporte público, pues está comprobado que estas mejoras aumentan el rendimiento sin incrementar la contaminación. Uno de los objetivos de la mejora del transporte público debe ser el uso eficiente de las vialidades. Es inevitable que el número de automóviles continúe creciendo, por lo que el transporte público debe modernizarse para ir reduciendo su uso, incrementando el número de sus usuarios.

En los casos de éxito se ha procurado definir adecuaciones al servicio en respuesta a las preocupaciones y actividades de la comunidad, dando especial importancia al análisis costo-beneficio de los componentes de los sistemas propuestos. No hay dos proyectos iguales, pues cada caso debe examinar las condiciones particulares de cada ciudad, su dinámica poblacional y las consecuencias de las modificaciones propuestas a lo existente, considerando el desarrollo institucional, la administración multimodal, los cambios en el uso de los espacios viales, la gestión financiera y el modelo de urbanización; no es un simple cambio de rutas y de unidades. 

En todas las experiencias exitosas el sector privado ha sido un actor esencial; en el éxito de estos proyectos el detonante ha sido la solución a los problemas actuales, en procesos en los que se ha considerado la participación de todos: usuarios, concesionarios, asesores, proponentes de nuevos sistemas, autoridades en la materia e inversionistas; para que un proyecto de transporte sea viable y exitoso debe tomar en cuenta el punto de vista de todos.

Cuando se analiza la demanda metropolitana, que en el caso de la ciudad de Mérida se debe incluir a las decenas de miles de personas que cada día viajan a la ciudad del interior, los nuevos e innovadores sistemas pueden ser costosos y no beneficiar a las grandes mayorías, que debe ser el objetivo principal.

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