Mérida y sus aguas residuales (3)
“Foro para la Atención de la Contaminación de los Humedales Costeros y el Acuífero de Yucatán”.
Es indiscutible la preocupación que desde hace ya muchos años existe en torno al proceso de deterioro del acuífero que subyace a nuestro estado, especialmente por el impacto de las aguas residuales generadas en la zona metropolitana de Mérida, pero lo cierto es que no basta con estar preocupados; esta preocupación ha motivado diferentes foros y talleres de discusión, entre los que recuerdo, por la amplia participación que tuvo la sociedad, un foro multidisciplinario realizado el 6 de diciembre de 2003, al cual se denominó “Foro para la Atención de la Contaminación de los Humedales Costeros y el Acuífero de Yucatán”.
En el desarrollo de este Foro, recuerdo que se señaló que “lo que empecemos a hacer hoy será un esfuerzo que será reconocido por los yucatecos y los mexicanos como un gran trabajo que benefició al Yucatán de hoy y beneficiará al Yucatán que queremos construir”, y lo cierto es que todos los que acudimos pensamos que estábamos en un momento en el que habría un cambio definitivo en materia de preservación del acuífero y manejo de las aguas residuales.
En las mesas de trabajo que se instalaron se analizó y discutió abiertamente la problemática de una manera integral y con una gran participación; los problemas detectados, que se acordó requerían de una atención inmediata, se agruparon en cinco grandes temas: normativa insuficiente e inadecuada; fecalismo al aire libre; ineficiencia en el manejo y disposición final de las aguas residuales; desarrollo de un programa de educación y cultura ambiental en torno al manejo del agua, y la falta de personal especializado en el sector público.
En los nueve años siguientes, los acuerdos y compromisos ahí adquiridos por instancias, tanto educativas, como públicas y privadas, poca atención recibieron; en estos 9 años, muchos talleres, foros y consejos consultivos se han instalado y operado en la ciudad y el estado, pero hoy apenas nos acercamos a una atención integral a este serio e inaplazable problema, mismo que sólo será eficientemente atendido si toda la sociedad toma conciencia de su corresponsabilidad, de su indispensable compromiso de modificar usos y costumbres en un escenario con la normativa adecuada respetada por todos.