¡Monumento a Héléne!
La columna Viernes Cultural lee, en alta voz, al Transcriptor, un párrafo de la novela de Andrea H. Japp, La Piedra Roja.
La columna Viernes Cultural lee, en alta voz, al Transcriptor, un párrafo de la novela de Andrea H. Japp, La Piedra Roja, en la que el personaje Héléne D´Antigny, le dice a su esposo Herbert:
- “Esposo mío, me dan igual vuestros amoríos. Sin embargo, exijo, oídme bien, he dicho exijo, no ser jamás el hazmerreír de nuestra casa o del populacho. Cornuda, ¿por qué no? A la vista está que mis hermanas, mi madre y mi abuela lo fueron sin que ello perturbase el encanto de sus vidas. ¡En cambio, humillada, de ninguna manera! No habrá una segunda advertencia. Tan sólo ésta, amigo mío”.
El Transcriptor corre a levantar un monumento a la excelsa Héléne y a su encantadora y cornuda familia.
Lo tiene que hacer en secreto, sin que lo sepa Patricia, ya que ella no le advertiría, sino que lo ¡mataría! Y dos veces seguidas hasta que quede bien y definitivamente muerto.
De nada… Saludos…