¡Ya empezó el Mundial! No sé a usted, pero a mí me encanta y lo espero con ansias cada cuatro años. Me encanta ver la pasión de la gente y la capacidad que tenemos, en todo el mundo, de unirnos en torno a algo tan sano como el deporte. Aunque no falta quien use la teoría de que el Mundial es un distractor de la traición que nos van a hacer los diputados y senadores con las reformas que se vienen y que, casualmente, serán los mismos días que juega la Selección. A esos les digo, con todo respeto, que son unos amargados. Apuesto que la gran mayoría ni siquiera sabe el nombre de los diputados de su Estado. Disfruten la vida, tan bonito que es andar llenando quinielas y tener la satisfacción de ver ganar al equipo de nuestra preferencia.

Por lo pronto, yo ya llené la mía con Raúl Paz. En Facebook, súper fácil,  rápido y con la satisfacción de que aun si no le atino a ningún marcador, también podría ganar. Suena bien, ¿no? Para ser honesta, se me hace muy extraño que otros de los aspirantes a algo no anden en la fiebre del mundial. 

Además de Raúl Paz, sé que Mauricio Vila andaba regalando playeras de la Selección y ambos pondrán sendas pantallas para ver los partidos, pero nada más. 

Me extraña, de inicio, que Salvador Vitelli no le haya entrado a la fiebre mundialista, como sus principales competidores. También me extraña que Panchito Torres no ande en eso. Ya hubiera armado su mundialito, uniformando a todos y regalando cualquier cantidad de cosas. O que Nerio no haya rifado playeras o comidas en algún lugar para ver los partidos. O incluso que Ivonne Ortega no haya mandado a hacer playeras de la selección del corazón para regalar en alguna convivencia con sus adeptos. 

Sí me extraña, pero también me da gusto que no hayan entrado a ese juego del populismo extremo. Espero no haber dado ideas… y si acaso alguno decide usar alguna, pues cuando menos que nos invite.

Y hablando de regalos, el que sí anda con todo para su posible candidatura es Víctor Caballero. Nos mandó un pequeño detalle por el Día de la Libertad de Expresión, el cual por supuesto se agradece, para quedar bien con las plumas locales, como me dijo una persona. Muchos ven cuatro competidores dentro del PRI, yo solo veo dos: Mauricio Sahuí y Víctor, de quienes ya comenté la semana pasada. Pienso que incluir a los Torres (Nerio y Panchito) es nada más para hacer bola. Ninguno está tan bien posicionado y me parece que las aspiraciones de Nerio van más allá de repetir una campaña fracasada; y las de Panchito van a otro lado, para no competir con su compadre Mauricio. 

Las competencias no se acaban, las políticas durarán todo el año, las deportivas, solo un mes. Habrá que sentar prioridades.

 ¡Disfrute el Mundial!