Para el espectáculo nada mejor que las sorpresas y en lo que va del desarrollo del Mundial, que se celebra en Brasil, eso resulta una indiscutible realidad que se refrenda todos los días, en cada uno de los partidos, en los que sin embargo parece confirmarse la tendencia: “América para los americanos”, dada la constante histórica de que en los mundiales llevados al cabo en el Nuevo Continente son los países americanos quienes se han alzado con el triunfo.

Y en los del Viejo Continente sólo han ganado los europeos, como si los países asiáticos, africanos y de Oceanía fueran sólo mirones de palo.

Pero más allá del país anfitrión, siempre favorito para llevarse el triunfo, que ha tenido un desempeño aceptable, ha sido el futbol de Costa Rica, con 24 años sin pasar a la segunda ronda, el que ha destacado de manera sobresaliente al dar cuenta de dos de los campeones mundiales considerados de los más grandes, primero de Uruguay remontando un adverso marcador y luego de Italia, al anotar el único gol del encuentro. 

Ambos se tendrán que ver las caras en un juego de matar o morir para definir cuál de los dos se queda… y quién se va.

Destacada también, pero en sentido negativo, ha sido la pésima actuación del equipo campeón del torneo pasado, España, a la que, en sincronía con el declive de su trasnochada monarquía, le bastaron dos partidos para decirle adiós a su copa, al cobrarle Holanda viejas facturas  con la severa humillación del marcador más abultado, que hizo ver las deficiencias de su ya rebasado sistema de juego basado en los toques cortos. Chile, con largas ausencias en los mundiales, le dio la estocada final.
    
La otrora gran potencia futbolera Inglaterra, con uno de los torneos más caros del mundo, sucumbió también con dos derrotas, primero en cerrado juego contra Italia y luego contra los charrúas que demostraron lo peligrosos que son cuando están contra la pared y no tienen más remedio que ganar.

México ha sido para mí la sorpresa más agradable por su excelente desempeño, luego de una sufrida calificación en repechaje. Su ejemplar defensa ante Brasil mostró las deficiencias del futbol carioca así como las ventajas del juego de conjunto. Con un poquito más de gol tendría mayores posibilidades de trascender.

Holanda, Francia y Alemania son los equipos europeos que han sabido adaptarse mejor a las exigencias del clima y del juego en América, sin embargo las dificultades que pasó la Naranja Mecánica contra  Australia así como Alemania ante Ghana, a la que con dificultad le sacó el empate, confirman el viejo adagio de que no hay rival pequeño.

Argentina va bien, no exenta de dificultades, ha ganado sus dos primeros partidos, aunque dicen que resultó beneficiada, lo mismo que Francia, al quedar en un grupo “flojo”. 

Sospechosamente se publicó en su país su ubicación antes del sorteo correspondiente.

La nota negra del arbitraje la dio el abanderado colombiano que le anuló dos legítimos goles a México, lo que puede complicarnos el pase que, no tengo duda, vamos a conseguir.