Sus seguidores se hacen llamar “Oribelivers”, en los medios de comunicación le dicen Cristiano Peralta- en comparación con el astro portugués- y en México #TodosSomosHermoso.

México tiene un nuevo ídolo, tan pronto como pasó la crisis del Hexagonal y el Tricolor avanzó a Brasil 2014 por repechaje, los aficionados aztecas se olvidaron de las figuras como Javier “Chicharito” Hernández, Carlos Vela o Giovanni Dos Santos y crearon uno nuevo; Oribe Peralta.

Y es que en México somos muy dados a olvidar el pasado, dejarnos llevar por el presente, inflar figuras y dejarlas caer. Hoy Peralta es el nuevo héroe mexicano.

El delantero de Santos no es el más efectivo de la Barclays Premier League, no anuncia tarjetas bancarias, no hace sándwich, no toma coca cola, no vende en coppel, home depot, ni juega en poker stars, si acaso ha tomado una Pepsi y estuvo ahí cuando la selección mexicana necesitó de sus goles, aunque después de lo hecho en el hexagonal estoy seguro que su valor se elevó hasta 10 veces por encima de su precio original y lo veremos en más anuncios comerciales.

¿Quién es Oribe Peralta?, es un coahuilense de 29 años, que debutó a los 19 con Monarcas, Morelia, tan sólo 6 años después de haber entrado a su primer equipo de fútbol en Torreón, denominado “Los Vagos”.

En el 98, cuando Peralta cursaba la preparatoria fue convocado al equipo oficial de “La Partida” para jugar contra los otros municipios de Coahuila, ingresó al Centro de Sinergia Futbolista (Cesifut) y al año sufrió su primer golpe; fractura de tibia y peroné que lo alejó de las canchas un año.

Regresó para integrarse a las filas de Alacranes de Durango, donde llamó la atención de Oscar Ruggeri, quien lo llevó a Chivas para probar suerte y después Rubén Omar Romano lo instaló en Monarcas, Morelia, donde estuvo 2 meses a prueba sin goce de sueldo.

Finalmente debutó en el 2003 con Morelia, ingresó al 87’ en el enfrentamiento contra las Águilas del América.

Ha portado la playera de León, Monterrey, Chivas (en la Copa Libertadores de 2005), Jaguares y Santos, en este último equipo vivió dos facetas, primero en el 2006 donde fue relegado a la banca y posteriormente en el 2010, año en el que inició su consagración.

Tras su actuación en el repechaje ante Nueva Zelanda, el “Cepillo” Peralta se convirtió en el mejor delantero mexicano de la eliminatoria mundialista con 10 anotaciones, por encima de Javier Hernández.

Oribe estuvo presente en los últimos 4 juegos del hexagonal ante Honduras, Estados Unidos, Panamá y Costa Rica, anotando en tres, excepto contra Estados Unidos.

Pero el crecimiento de Peralta inició en el 2012, cuando fue parte fundamental para obtener el oro en los Juegos Olímpicos de Londres 2012.

La leyenda del “Hermoso” Peralta se escribió en tres encuentros, contra Suiza en la fase de grupos, Japón en las semifinales y Brasil en la final. Oribe Peralta hizo el par de anotaciones, con las que México venció 2-1 a Brasil y se apoderó del oro olímpico.

Con estos números y la motivación de Oribe Peralta, me atrevería a decir: ¡Cuidado con Santos en la liguilla!.

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