No estamos solos...

Curiosity ha estado tratando de detectar, por métodos fisicoquímicos, la presencia de carbono proveniente de materia orgánica en la superficie de Marte.

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La noticia de esta semana nuevamente viene de Marte: el robot explorador Curiosity, de la NASA, que llegó al cráter Gale hace 16 meses, analizó rocas en un sitio llamado Bahía Yellowknife y descubrió, según publica MILENIO, “evidencia directa de que existió un lago de agua dulce en ese planeta”. ¿Qué descubrió Curiosity ahora?

Un artículo de John Grotzinger y sus colegas en la revista Science informa que se descubrieron “rocas sedimentarias de grano fino, que por inferencia representan un antiguo lago”.

Las rocas sedimentarias se forman cuando se depositan pequeños granos rocosos, normalmente suspendidos en agua, que con el tiempo van convirtiéndose en un sedimento sólido. Su presencia, por tanto, permite suponer que hubo agua (Curiosity y otras misiones han hallado otras evidencias de agua en el pasado remoto de Marte). Y donde hubo agua, podría haber habido vida.

Curiosity ha estado tratando de detectar, por métodos fisicoquímicos, la presencia de carbono proveniente de materia orgánica en la superficie de Marte. Pero no ha logrado pruebas claras: por un lado, hay materia orgánica que se forma en el espacio por procesos químicos, sin necesidad de vida, y que cae en Marte.

Por otro lado, la materia orgánica que pudiera haber quedado como prueba de la existencia de antiguas bacterias en Marte probablemente habría sido ya destruida por los rayos cósmicos y ultravioleta, u oxidada por los percloratos que abundan en el suelo marciano.

De cualquier modo, los datos reportados en el artículo permiten suponer que, si hubiera habido vida en Marte, un lugar factible habría sido el fondo lodoso del lago que quizá existió en el cráter Gale. Y es más: las bacterias que hubieran vivido ahí probablemente habrían tenido que ser quimiolitótrofas, es decir, capaces de utilizar para sus funciones metabólicas la energía que se libera en reacciones químicas cuando unas moléculas se oxidan y otras se reducen (existen bacterias así en la Tierra).

La evidencia de que Marte podría haber albergado agua, y quizá vida, se acumula. Si llegara a confirmarse esto último, querría decir que la vida puede existir también en muchos otros sitios en el universo. Quizá no estamos tan solos…

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