Mare ya un poco más tranquilos después del tremendo susto que me dio Patricia; nooo el huracán, Patricia la que cobra mi abono de Coppel, es que saqué un refrigerador, pero en cómodas mensualidades: treinta, sesenta y noventa años para pagarlo, pero, ya que tocamos el tema, qué bueno que lo del huracán sólo fue un chan susto que no, porque si hubiera hecho los daños como se veía venir, pasumare quién sabe cuántos difuntos hubiera habido.

Lo que sí es una verdadera pena es lo que la gente hace por levantar un poco de polvo de grilla barata, ya le están echando la culpa a Peña: que todo fue una cortina de humo, incluso vi un video del político del PRD y luego del PT José Fernández Noroña, donde hizo como un tutorial, echando la culpa al presidente Peña, que él manipuló a todos los medios para distraer a la gente con el tema del huracán; la verdad para ser sociólogo demuestra dos cosas: o ser un ignorante o ser un grillero.

Porque querer confundir a la gente. Señor Fernández no puedes comprar a todas las televisoras del mundo para que digan la noticia del huracán, las imágenes del huracán son tomadas por satélites y la escala del mismo la dan los sistemas meteorológicos, como el de Miami, que es parte de los Estados Unidos; por el amor de Dios, ya deje de decir tantas idioteces.

Lo que sí hay que aplaudir es la gran cultura que hay entre los mexicanos en protección civil, eso ayudó a que los daños fueran menores. 

Pero vamos a dejar ese tema, y regresando a lo nuestro, mare ya se siente el olor de los pibes, me acuerdo del kol y se escurre, no el kol, la baba; qué ricas son nuestras tradiciones.

Ojalá que no le vayan a pedir a los que organizan el FIC Maya que se encarguen de los pibes, porque, en vez de mucbilpollos, vas a ver en la mesa moros y cristianos y mojitos cubanos, masinó.