Obesidad infantil, flagelo cabalgante

La otra fase de la 'desnutrición infantil en México es el sobrepeso', que afecta cada vez a más niños...

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

El desayuno es una taza de café y una tortilla con sal, en la comida del mediodía  una ración de frijoles y tortillas, para la cena se repite la dosis de la mañana. Es el menú diario para Guillermo y Gabriela, de siete y cinco años; no hay para más.

¡No es una puesta en escena!,  es lo que comen decenas de miles de niños en incontables  comunidades del país. Carne, huevos y leche, cuando hay, se consumen en cantidad insuficiente para el óptimo desarrollo infantil.

Curiosamente hay otro tipo de desnutrición: “A Paco no le gusta la sopa, tiene seis años y prefiere la hamburguesa y los hotdogs que una  sopa de verduras, y los refrescos embotellados que el agua natural”. A pasos agigantados, las estadísticas muestran evidente crecimiento de enfermedades crónico-degenerativas. 

Se estima que 178 millones de niños menores de cinco años sufren desnutrición crónica (baja talla para la edad) en el mundo, la cual es responsable del 35%  (3.5 millones) de muertes en este grupo de edad. En México, 1.5 millones de niños la padecen.

La otra fase de la “desnutrición infantil en México es el sobrepeso”, que afecta cada vez a más niños. Cuatro de cada 10 pequeños entre 5 y 11 años tienen problemas de sobrepeso y obesidad, con predominio de mujeres. El desequilibrio energético entre lo que comemos y utiliza nuestro organismo es la razón principal. Destaco las bebidas gasificadas y alimento chatarra como los victimarios. Estos menores tendrán más problemas cardiacos y respiratorios y muy probablemente sean más propensos a enfermarse. 

Baste revisar la numeralia de problemas condicionados por sobrepeso: dos terceras partes de la población mundial habitan en lugares donde la obesidad se relaciona con otras enfermedades que causan la muerte. El 44% de la mortalidad por diabetes y el 23% de cardiopatías isquémicas son favorecidas por la obesidad. De los cánceres su asociación alcanza el 40%.

En una misma familia se pueden presentar las dos formas de desnutrición: niños con bajo peso y talla y niños con sobrepeso y obesidad, malnutridos. La vida y la salud de nuestros hijos deben tener prioritario interés. De ti depende cimentar su futuro para evitar lamentarnos de su fracaso. Súmate a la campaña de prevención contra la obesidad y enfermedades derivadas de la misma. Aporta de forma activa elementos de valor, que modifiquen este vertiginoso y enfermizo devenir que flagela a la niñez, futuro de nuestro Estado.

Lo más leído

skeleton





skeleton