Orgullo médico

Don Belisario Domínguez Palencia, nacido en Comitán, Chiapas, en 1889 obtuvo el título de médico por la Sorbona de París.

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El mes de octubre es un mes que enaltece a la Medicina. Desde hace 60 años, el ejemplo y valentía de un médico chiapaneco son reconocidos en una presea que entrega el Senado. El 23 se conmemora el Día del Médico desde la década de los treintas.

¿Pero, quién fue ese galeno que osó retar al entonces presidente de la República Victoriano Huerta? 

Nada menos que don Belisario Domínguez Palencia, nacido en Comitán, Chiapas,  y quien en 1889 obtuvo el título de médico por la Sorbona de París y su ejercicio profesional lo podríamos ejemplificar  en el siguiente pasaje: “Don Belisario Domínguez se implantó a sí mismo una forma para cobrar  honorarios: para los ricos, era el doctor Domínguez  especializado en París, cuya atención  tenía un costo muy alto, y para los pobres, sus servicios generalmente eran gratuitos o en su defecto recibía  animales y semillas”.

Este doctor fue cobardemente asesinado el 7 de octubre de 1913 por sicarios de Huerta. Fue tal el clamor público que provocó este crimen, que el usurpador se vio obligado a disolver el Congreso y encarcelar a 90 diputados. De su vida política, les comento que fue presidente municipal de su tierra natal y luego senador. ¿Pero qué motivó que lo encarcelaran y le segaran la vida, no sin antes cortarle la lengua? Pues les diré:

“Transcurrían los últimos días del mes de septiembre de aquel 1913, y el senador Dr. Belisario Domínguez, preocupado, redactó dos documentos, que con valentía atacaban el cobarde actuar de  Huerta y serían presentados en las sesiones del 23 y 29 de ese mes. Consciente de que dichos documentos debían ser conocidos por el pueblo, le agregó a sus discursos una

Nota: Urge que el pueblo mexicano conozca este discurso, para que apoye a la representación nacional, y no pudiendo disponer de ninguna imprenta, recomiendo a todo el que lo lea saque cinco o más copias, insertando también esta nota, y las distribuya a sus amigos y conocidos. ¡Ojalá hubiera un impresor honrado y sin miedo!”.

Por todo ello,  cada año desde 1953,  y  para honrar su memoria e impulsar a los  mexicanos  que por su ciencia o virtud en grado eminente son ejemplo de servicio, el Senado  otorga la presea Belisario Domínguez en el aniversario de su asesinato.

Como el Dr. Belisario Domínguez que fue  mutilado y asesinado por defender sus valores y principios, así tú, lector, no claudiques en la lucha cotidiana por vencer la adversidad, apatía y retórica política. El espacio real se encuentra no detrás de un escritorio, sino en la cama del paciente, que no sabe de números y que, más allá de lo mediático, sufre y comparte la enorme carencia de los dineros para “sobrevivir”.

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