Palabras poderosas

Podemos, en mucho, crear la vida que deseamos. Jesús dijo: “El Reino de Dios está a nuestro alcance”.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

“Participamos mucho más en la creación de nuestra vida de lo que nos damos cuenta”.-  Anónimo

Nuestras palabras son poderosas. Cuando cambiamos lo que decimos, comenzamos a cambiar nuestra vida. Si comenzamos a nombrar a las personas o situaciones de una forma que estimule nuestra energía positiva notaremos que, en lugar de ser una “molestia”, dichas personas y situaciones, pueden ser de gran ayuda.

Por ejemplo: en lugar de “Problema” llamémosle “Oportunidad”; en lugar de “Tengo que…” prueba con “Voy a…”; en lugar de “Enemigo”, “Amigo”; de “Dolor”, “Señal” o “Aviso”; en vez  de “Exijo”, “Me gustaría”; de “Difícil”,  “Poco fácil” de “…me atormenta”, “Es mi maestr@”.

Haz el intento. Al principio puede parecer incómodo, sin embargo, fijémonos cómo va transformando nuestra actitud respecto a alguna persona o situación. Cuando cambiemos la manera de expresarnos la situación también cambiará.

Podemos, en mucho, crear la vida que deseamos. Jesús dijo: “El Reino de Dios está a nuestro alcance”. Es decisión nuestra estar contentos o tristes, estar en el cielo o en el infierno. Se puede crear la vida que vivimos con las palabras que usamos.

Con esta sabia e inteligente manera de hablar, disminuye notablemente encontrar defectos en alguien o en algo. Démonos cuenta que, a mayor crítica, mayor recrudecimiento y/o expansión del defecto o situación desagradable.

Cuando criticamos a alguien, éste experimenta la necesidad de justificar su comportamiento y contraataca con lo que puede, así sea con algo que no viene al caso. La crítica destruye y cuando degradamos a alguien le estamos dando permiso implícito de seguir actuando de esa misma manera en el futuro.

Tomemos en cuenta que las personas respondemos mejor y más favorablemente al reconocimiento que a la crítica. La comprensión nos anima a superarnos y así ganar más aprecio. Todos tenemos la necesidad básica de ser reconocidos, valorados y tomados en cuenta, especialmente por aquellos que son importantes para nosotros.

A veces obtenemos la “atención” que necesitamos siguiendo una conducta negativa, rara  vez ésta es una acción consciente. Es tan vital la “atención” que la tratamos de conseguir de cualquier manera.

Tratemos y atendamos a los otros como nos gustaría que se comportaran y así los induciremos a mejores maneras y a su propia superación. ¡TODOS GANAMOS!
¡Ánimo! Hay que aprender a vivir.

Lo más leído

skeleton





skeleton