Pepinero se siente más allá de la ley

Andrés Magaña Jiménez se siente confiado en que más tardarán en ponerlo a disposición de las autoridades competentes que en volver a las andadas.

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La incorrecta aplicación de  la ley, en las que se establece que son Sagarpa y Conapesca las llamadas a realizar el decomiso de pepino de mar , pero nunca aparecieron en el lugar de los hechos, da pie a que, el detenido Andrés Magaña Jiménez, conocido en el medio como la “Pipijí”, se sienta confiado en que más tardarán en ponerlo a disposición de las autoridades competentes que en volver a las andadas, al grado que a sabiendas de que las lagunas en la ley intentó sobornar a los policías con dos mil cien pesos.

Mientras tanto vecinos de la calle 33 que viven cerca de la casa que se utilizaba como bodega y en la que hace unos meses se registró una balacera con motivo de la incautación de otro cargamento de pepino, temen que en cualquier ocasión de nueva cuenta se presente una situación como aquella, y que una bala perdida pueda alcanzar a algún transeúnte y en especial a los niños que son numerosos en la zona y que por su naturaleza tienden a acercarse a curiosear cuando hay algún movimiento de patrullas.

De hecho en el operativo del lunes, los más afectados resultaron los comercios ubicados en las calles donde en la persecución quedaron regadas bolsas de pepino, donde la policía montó guardia para impedir el paso a transeúntes desde el mediodía y hasta después de las diez de la noche cuando la PGR levantó el producto, de modo que sus ventas se desplomaron.

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