México, sus regiones y sus ciudades se encuentran inmersos en un proceso de construcción y consolidación de su democracia. En este proceso, un elemento vital es reconocer la pluralidad de la sociedad, compleja y preocupada, que necesariamente debe involucrarse, ordenada y comprometidamente, en todo el quehacer público, en el proceso de desarrollo sustentable y sostenible, requiriendo para ello la apertura institucional en todos los niveles de gobierno, una apertura que permita garantizar el derecho de todos a conocer la información gubernamental y la progresiva transparencia en la gestión pública.

Esto determina la necesidad de avanzar permanentemente en la revisión y construcción gradual de mecanismos y espacios de participación ciudadana, libre y abierta, con el propósito de consolidar procesos y acciones compartidas entre gobierno y sociedad, en cuanto a la planeación del desarrollo integral, enmarcado en la búsqueda permanente de una mejor calidad de vida para todos, a través de la evaluación y vigilancia de las políticas públicas y los programas gubernamentales, en todos los órdenes de gobierno.

Para ello requerimos de una sociedad comprometida, participativa, con capacidad para conocer, evaluar y proponer soluciones consensuadas a los problemas que afectan el desarrollo sustentable y sostenible, una sociedad que cuente con espacios de verdadera participación para expresar sus necesidades y gestionar sus propuestas, para contribuir a la construcción de un desarrollo que beneficie a todos. 

Bajo esta perspectiva, las soluciones a los problemas deben consensuarse entre todos los actores involucrados, lo que implica tener día a día una mayor transparencia en el acceso a la información y en los procesos de toma de decisiones, pero también la necesidad de impulsar la participación y el compromiso de toda la sociedad, tanto de los servidores públicos, como de toda la población.

Esta participación social requiere de promoción, cooperación y apoyo a la creación de mecanismos y redes de participación comunitaria, que impulsen la igualdad de oportunidades para todos, y de espacios para escuchar y tener en cuenta la diversidad de necesidades de quienes forman parte de una comunidad.