Cerca de unos 30 taxistas se manifestaron en un documento dirigido al titular de Sintra, Javier Zetina González, exigiendo al secretario general del Sindicato Único de Choferes de Automóviles de Alquiler (Suchaa), Eliezer Argüelles Borges, quien lleva más de un año al frente de los taxistas de Chetumal, sacar a los integrantes de su planilla electa, para quedar integrantes de las coaliciones en lugar de ellos.

Con las consignas –según peticionarios– acordadas en la mesa de negociaciones con líderes de trabajadores del volante al frente de las coaliciones integradas en el mismo gremio, pidieron la intervención de las autoridades para lograr una nueva conformación del comité directivo que comanda el actual dirigente de los ruleteros.

Aunque en el documento no señalan que se vaya el líder del Suchaa junto con su directiva, sí exponen una lista, con nombres y apellidos, junto a los nombramientos de los taxistas disidentes a ocupar la nueva directiva de llegar a ser aceptados por el líder en turno.

En la petición participaron diversas corrientes opositoras a Eliezer Argüelles Borges dentro y fuera del Suchaa, principalmente la llamada Coalición Suchaa, Nueva Coalición Suchaa y la sempiterna cooperativa antagónica Frontera Sur.

El líder del Suchaa convocó a una rueda de prensa en el local de la agrupación tras la manifestación de los taxistas disidentes, en la que mostró documentación que avala la solicitud para que se destituya al actual comité directivo sindical, pues se va demostrar legalmente que no se cumple con la legalidad, salvo que sea avalada en Asamblea General, dijo.

Se requiere la revocación de la asamblea de elección efectuada en los inicios del año 2012, donde fue electa la planilla de Eliezer Argüelles Borges, y luego en la Junta local le concedieron la Toma de Nota, en donde se avala que las elecciones fueron ganadas con votos favorables y, con ello, la derrota para los disidentes.

La permanencia de la directiva al frente del Suchaa es legal, la Junta Local no revoca la Toma de Nota, e incluso le otorga certidumbre para un ciclo de tres años, por lo que parece una nueva jugarreta de la disidencia.

En el caso de la demanda de los socios porque no les quiere dar las concesiones que les prometió para dárselas a recomendados, el líder de los taxistas de Chetumal, explicó que ello está en un compás de espera dentro del ciclo que inició en 2012 y termina en este año, mientras se logra que les validen sus derechos de concesiones a los taxistas.

En lo que concierne a las finanzas del Suchaa, el líder conmina a sus detractores a verificar, junto con quien corresponda, los balances del año lectivo 2012, en donde se muestran los ingresos y egresos, en el tiempo que se lleva desde que asumió la dirigencia.

En los rubros como la atención de la salud de los socios y ayudantes, gastos funerarios, el pago de la deuda que arrastran por el autoaseguramiento –que ya no está activo-, salarios caídos y finiquitos ordenados por la STPS, más laudos perdidos y sentencias de la misma dependencia, que arrojan cantidades importantes, entre otros gastos, lo que arroja números rojos en las finanzas del sindicato.

En otra demanda relacionada con la gasolinera Kohunlich, que es con capital privado y no del Suchaa –dijo el líder–, lo cual delimita ingresos porque la anterior dirigencia la dejó endeudada, por lo que poco a poco se irán solventado los adeudos anteriores, ello sin recibir actualmente aportación del porcentaje de ganancias de la gasolinera al Sindicato.

El líder de los taxistas no parece sentirse sitiado por los grupos de coaliciones, pues argumenta que pese a tener la ley de su lado, la dirigencia que encabeza cumple a cabalidad, pues los disidentes tienen otros intereses y, los convoca a integrarse a la unidad del gremio en aras de servir bien a la sociedad chetumaleña con un cambio de actitudes e imagen que desde el Suchaa se han propuesto.