El pasado 20 de septiembre empezó oficialmente para la República Mexicana la temporada de frentes fríos que, de acuerdo con los pronósticos dados a conocer por el Servicio Meteorológico Nacional, se espera que sean 50 los fenómenos de esa índole que nos afecten en este periodo que finalizará hasta principios del mes de mayo de 2017. 

Para Yucatán la temporada de frentes fríos se debe de iniciar a mediados de este mes, que es cuando por fin las masas de aire polar lograrán alcanzarnos; aunque a veces llegan antes de esa época a nuestra zona, por lo general arriban a la región apenas finalizando la temporada de lluvias, lo que debe de ocurrir a mediados de este mes.

Ya llevamos dos frentes fríos en la república, pero sólo han afectado a todo el norte del país e indirectamente al centro con sus noches, madrugadas y amaneceres frescos; aquí en Yucatán ya se siente ese ambiente, ya que el último frente frío -el que fue designado como número 2- se quedó estacionario a mitad del Golfo de México y sus efectos indirectos fueron un poco de fresco por la noche, la madrugada y el amanecer.

Lo más importante es que la masa de aire frío que generó este fenómeno es muy amplia, ya que va desde el norte de la costa atlántica de los EU hasta el norte y noreste del país y produjo una vaguada prefrontal que nos protegió del terrible huracán Matthew, al que no le quedará otro camino, afortunadamente y todo parece indicar que así será, que seguir su desplazamiento hacia el oeste-noroeste y ser arrastrado por esta vaguada hacia el norte, tal como ocurre actualmente.

Los frentes fríos nos ayudan a evitar que los huracanes se nos acerquen, pero también provocan en estos ciclones movimientos erráticos y que se desplacen algo lentos, lo cual desconcierta a los pronosticadores.

Cuando se forman huracanes en esta época es cuando provocan mayor destrucción a los sitios donde azotan por su lento desplazamiento y el mayor tiempo que permanecen en la zona.