Residuos
Uno de los asuntos que hoy deseo comentar es el de los desperdicios que generamos todos los días...
No hoy, sino en todo momento, es de muy alta importancia que los ciudadanos nos interesemos y nos ocupemos de los asuntos que nos afectan como comunidad. En las circunstancias y condiciones actuales, políticas, económicas y sociales, se vuelve aún más relevante y pertinente hacerlo. Es ésta una hora oportuna de construir con mayor solidez eso que llamamos el “tejido social”, de afianzar los cimientos que han forjado nuestra identidad y de asegurar de una vez por todas que la participación social positiva en los grandes temas de carácter público es la clave para mejorar constantemente y propiciar el desarrollo de nuestras ciudades, nuestro Estado y país.
Uno de los asuntos que hoy deseo comentar es el de los desperdicios que generamos todos los días, lo que coloquialmente llamamos basura, o en algún lenguaje un poco más técnico se conoce como Residuos Sólidos Urbanos (RSU). En primer lugar tendríamos todos que entender, de una vez por todas, que somos responsables de esos desperdicios o residuos por lo que les quede de vida o al menos hasta que alcancen el sitio de disposición final, cualquiera que éste sea; incluye la responsabilidad de asumir el costo que todo este proceso tiene implícito.
Por otro lado, es comprensible que no todos puedan ser expertos en este tema, pero solamente interesarse por conocerlo y aprender ya sería de gran ayuda. Todos deberíamos de saber qué ocurre después de que depositamos una bolsa llena de desperdicios, idealmente separados, en la acera de nuestros hogares para que recojan los empleados de las empresas que tienen la concesión para recolectarlos y trasladarlos.
De hecho hoy día, a nivel mundial cobra auge utilizar para denominar todo este proceso las palabras: Gestión Integral de Residuos, que se define como un conjunto articulado e interrelacionado de acciones regulatorias, operativas, financieras, administrativas, educativas, de planificación, monitoreo y evaluación para el manejo de los residuos desde su generación hasta su disposición final. Este concepto involucra al menos 6 etapas: generación y separación, recolección, transferencia y transporte, tratamiento, reciclaje y disposición final.
El objetivo de un sistema GIR es reducir o eliminar por completo los efectos perjudiciales que estos residuos representan para la salud humana y para el medio ambiente.
En cada etapa, existen enormes oportunidades de mejora respecto del modo en que se realiza hoy en esta capital. Nuestra responsabilidad como generadores de esos desperdicios recaería primero en reducir la cantidad y separarla, no sólo en orgánica e inorgánica, sino también colectar y envasar de forma separada los plásticos, los metales y los que pueden ser considerados como peligrosos por su gran potencial contaminante, como las pilas. Más adelante en el proceso, es muy importante el reciclaje, los países más avanzados alcanzan a reciclar hasta 70% de sus desperdicios, y en Mérida creo que debemos andar alrededor del 5% cuando mucho.
Todos podemos contribuir. Interesarnos, conocer y aprender es un buen comienzo.