En Quintana Roo, el decreto de luto nacional emitido por Enrique Peña Nieto fue ignorado olímpicamente por la Oficial Mayor, Rosario Ortiz Yeladaqui, a quien poco o nada le importó la enorme tragedia que cobró 36 vidas en la torre de Pemex, dejando muy mal parado al estado ante el presidente de la República. 

 

La omisión es sumamente grave, ya que el decreto presidencial fue publicado en el Diario Oficial de la Federación un día después de la trágica explosión. 

 

Este decreto de luto nacional –el primero que realiza Peña Nieto en su mandato– se publicó con base en los artículos 15 y 19 de la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales, y 27 de la Ley Orgánica de la Administración Pública Federal.

 

Y es que sin duda que la tragedia ameritaba una reacción de este nivel del presidente, que de inmediato manifestó su solidaridad con las familias de los que perdieron la vida, dando la instrucción precisa que debió cumplirse a cabalidad.

 

La publicación de esta orden presidencial señalaba de la siguiente manera: “Que el Gobierno de la República, ante dicha tragedia, manifiesta su más profundo dolor con motivo de los fallecimientos y las lesiones sufridas, y reitera a las familias y personas afectadas su solidaridad… en testimonio del dolor ante el suceso antes referido, he tenido a bien expedir el siguiente decreto”: Y continúa: “Primero.- Se declara duelo nacional de tres días por la tragedia ocurrida en el edificio de Petróleos Mexicanos; segundo.- en señal de duelo nacional, se acuerda el izamiento de la Bandera Nacional a media asta los días 2, 3 y 4 de febrero”.

 

Por eso llamó mucho la atención que en la Explanada de la Bandera de esta capital, la bandera mexicana no ondeó a media asta ni el sábado, ni el domingo, ni el lunes. 

 

La orden de Enrique Peña Nieto fue echada en saco roto por la funcionaria estatal. ¿Será que nadie le aviso a Charito de la tragedia en Pemex? ¿Acaso no se enteró del decreto presidencial?

 

Las preguntas son muchas y la Oficial Mayor tiene que rendir cuentas de esta grave omisión, porque en las atribuciones legales de la dependencia, en la sección séptima, Artículo 24, fracción VII se especifica que es su responsabilidad “Organizar en coordinación con las Dependencias, Órganos Administrativos Desconcentrados y Entidades del Poder Ejecutivo, así como con los sectores social y privado, los actos cívicos y los eventos sociales, culturales y especiales del Estado”.

 

Al parecer, la funcionaria chetumaleña se tomó unas buenas vacaciones aprovechando el fin de semana largo y ni se enteró de la trágica noticia que conmovió a todo el país. 

 

O quizá no supo nada del luto nacional porque en los casinos de la zona libre de Belice no tienen televisores.