Sana distancia, leyenda urbana

Zedillo ejerció un férreo control sobre el PRI como lo demuestra que en sus seis años de gobierno designó a seis presidentes del partido.

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Luego el que sabe no habla y el que habla no sabe. Florestán

El miércoles por la noche, al comentar en Tercer Grado la integración del presidente Enrique Peña Nieto a la Comisión Política Permanente del PRI, salió el comparativo con la llamada sana distancia del último presidente priista del siglo XX, Ernesto Zedillo, y se llegó a apuntar que ese había sido el factor que llevó al priismo a perder la Presidencia de la República en 2000.

Yo diferí de ambos puntos.

En cuanto al primero es cierto el desprecio de Zedillo por la clase política priista y su declaración de la mencionada sana distancia que para mí, en los hechos, fue una leyenda urbana.

Y lo digo porque Zedillo ejerció un férreo control sobre el PRI como lo demuestra que en sus seis años de gobierno designó a seis presidentes del partido y por poco son siete.

Al inicio de su gobierno, diciembre de l994, quitó de la presidencia priista a Ignacio Pichardo Pagaza, al que ignoró durante toda su campaña presidencial habiendo puesto como cabeza del PRI, desde su secretaría general, a Esteban Moctezuma. Así designó a María de los Ángeles Moreno, hasta l996, cuando Zedillo colocó a Santiago Oñate, al que removió tras la asamblea de los candados, designando a Humberto Roque, a quien en 1997 cambió por Mariano Palacios, al que en 1999 relevó con José Antonio González Fernández y, por último, ya en 2000, ungió a Dulce María Sauri, quien le presentó directamente su renuncia en Los Pinos a la derrota electoral de Francisco Labastida, renuncia que Zedillo rechazó. De haberla aceptado, desde su sana distancia hubiera designado a un séptimo presidente del PRI en su sexenio.

Por eso digo que lo de su sana distancia fue una leyenda urbana.

Lo que sí fue determinante en la derrota del PRI en 2000 fue su reforma política en l996, que llevó a que al año siguiente, 1997, él perdiera por primera vez su mayoría histórica en la Cámara de Diputados y tres años después, en 2000, la Presidencia de la República.

Retales

1. GRANIER. A pesar de que Arturo Núñez denunció que Andrés Granier se robó, dijo textualmente, mil 900 millones de pesos en 2012, no incluyó su nombre en la denuncia que presentó en la delegación de la PGR;

2. RESCATE. La Comisión Nacional Bancaria y de Valores habrá de investigar quiénes se enriquecieron con la información privilegiada de las desarrolladoras que cotizan en bolsa, y que habían perdido hasta el 50 por ciento de su valor antes del anuncio oficial de que el gobierno las rescataría. Saben quiénes compraron; y

3. AMPAROS. Francisco Arriola, ex esposo de Elba Esther Gordillo, y René Fujiwara Apodaca, ex yerno, obtuvieron un amparo contra una orden de aprehensión que Jesús Murillo Karam dijo que no se ha solicitado, todavía.

Nos vemos el martes, pero en privado

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