Siempre y nunca a un lado… ¡sólo por hoy!

Las palabras “siempre” y “nunca” no deberían de existir, pero ya que existen deberíamos ser muy cuidadosos para decirlas y, sin embargo, las soltamos con tanta facilidad, creo que no muchas veces concientizamos las cosas que decimos.

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Las palabras “siempre” y “nunca” no deberían de existir, pero ya que existen deberíamos ser muy cuidadosos para decirlas y, sin embargo, las soltamos con tanta facilidad, creo que no muchas veces concientizamos las cosas que decimos.
 
Las palabras que debemos acentuar son:  “hoy”, “ahora”, cuando decimos siempre tenemos la gran ilusión en ese momento de que las cosas no terminen y que sean eternas, afortunadamente podemos y somos libres de cambiar de opinión.
 
Qué pasaría si no pudiéramos dar vuelta atrás, entonces seguro que lo pensaríamos mucho más, pero como no pasa nada, pues no importa, comprometemos la palabra y juramos y perjuramos que las cosas serán por siempre y nunca cambiarán, ¡sorpresa!, no todo depende de nuestras ganas o de nuestra buena voluntad, la vida nos da giros que muchas veces no nos esperamos.
 
El vivir intensamente el hoy y el ahora no sólo hace que valoremos lo que tenemos en ese momento, si no que podría evitarnos muchos corazones lastimados.
 
Si fuéramos más conscientes de que las cosas no son para siempre, y no es por falta de deseo, es por muchos factores que intervienen, eso no quiere decir que sólo tengamos la idea de vivir el momento, y que no nos preocupe lo demás, por supuesto que también tenemos que planear nuestra vida y nuestras cosas.
 
Pero hagamos a un lado estas palabras, también nos obligaremos a no dejar para mañana las cosas que debemos hacer hoy, creo que todos conocemos la frase “sólo por hoy”, cuando se piensa así: sólo por hoy de alguna manera nos libera del yugo de “para siempre”, y es precisamente porque el control de nuestra vida lo tenemos aquí ahora, no sabemos mañana que pasará, pero hoy sí, lo tenemos entre las manos, lo estamos sintiendo, por hoy es muy fácil cumplir metas, deseos, que juntando los días de metas alcanzadas harán que tengamos una vida con mucha satisfacción.
 
Yo personalmente sí he aplicado muchas veces el “sólo por hoy”, sólo por hoy voy a sonreír más, por hoy no voy a pensar en algún problema, sólo por hoy voy a dedicarme a resolver pendientes; digo, el sólo por hoy no siempre es para hacer cosas felices, también puedes darte un sólo por hoy me voy a dar chance de llorar mis penas, sólo que no hagas las mismas cosas días y días seguidos, cambia tu sólo por hoy, pero enfócate en siempre hacerle un hueco a cosas importantes.
 
Por ejemplo, si tienes que dejar un vicio, entonces sí dale prioridad a eso, y hazlo hasta que logres hacer un hábito y vencerlo; la idea del sólo por hoy es lograr cosas que nos cuestan mucho trabajo, y que el saber que sólo lo tenemos que hacer por pocas horas, pues parece que engañamos a nuestro subconsciente y nos da el permiso de sentir que es más fácil, pero tú puedes aplicarlo como quieras para ir resolviendo pequeñas cosas también. 
 
La idea de reflexionar con las cosas que escribo es lograr hacernos la vida más fácil, que las situaciones no las veamos tan pesadas, que entendamos que no todas las cosas pueden salir a nuestro antojo, y que aún así debemos aceptarlas, y si es así pues hagámoslo buscando el lado amable de las situaciones, nuestro objetivo en la vida sólo debe estar enfocado en buscar ser felices, “y si no te sientes así, ¡sólo por hoy intenta hacerlo!”.

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