Muchas veces hemos escuchado sobre la sustentabilidad ambiental y nos hemos puesto a pensar si en verdad estamos realizando acciones para favorecer el proceso de alcanzarla, pero creo que nos falta mucho por aprender y entender en el tema. Primeramente debemos definir la base del proceso de sostenibilidad para comprender la raíz (así le llamo yo) de lo ambientalmente sustentable.

La sostenibilidad se conoce como la capacidad de continuar de manera indefinida un comportamiento determinado, por eso sostenibilidad ambiental es igual a conservar de manera adecuada y proteger el medio ambiente de una forma indefinida.

Pero tal vez lo complicado es entender que lo que realmente está pasando es que estamos agotando nuestros recursos no renovables finitos, el índice de agotamiento de los mismos no debería superar el tiempo de desarrollo de sustitutos comparables y derivados de recursos renovables para ese recurso.

En tal medida debemos reconocer la sostenibilidad ambiental como la tasa de aprovechamiento de los recursos renovables, la creación de contaminación y el agotamiento de los recursos no renovables. Para calcular la sostenibilidad ambiental, el principio rector es el estado del planeta a futuro, medido en períodos predeterminados de años (un lustro, una década, un siglo, un milenio).

Muchos de los proyectos en los que se basa la sostenibilidad ambiental implicarán, por ejemplo, la replantación de bosques, la preservación de humedales y la protección de áreas naturales. El objetivo de la sostenibilidad ambiental debiera ser conservar los recursos naturales y desarrollar fuentes alternas de energía, mientras se reducen la contaminación y los daños al medio ambiente causados por culpa de las acciones antropogénicas.

Es por eso que las acciones principales para hacer frente al cambio climático son las medidas de adaptación y mitigación ante los efectos que estamos viviendo. Algunos críticos dicen que la sostenibilidad ambiental va en contra del modelo económico actual, que es imposible de cambiar por más degradante que resulte para el medio ambiente y que ninguna forma de crecimiento económico puede continuar indefinidamente.

La mayor crítica a la que se enfrentan las iniciativas que promueven la sostenibilidad ambiental es que sus prioridades pueden estar en desacuerdo con las necesidades de una sociedad creciente, hiper consumidora e industrializada. Y eso nos pone a pensar mucho sobre nuestras acciones para con nuestro hermoso planeta.