Teatro y futbol

'El teatro no es para todos, así como el futbol tampoco', por eso el único evento relacionado con el futbol que disfruto plenamente es 'El mundialito'.

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No soy afecta al futbol, como mucha gente no lo es al teatro. “El teatro no es para todos, así como el futbol tampoco”, diría una amiga. 

El único evento relacionado con el futbol que disfruto plenamente es “El mundialito” que se realiza en el Centro de Reinserción Social, que dirige el profesor Francisco Brito. 

Ser testigo de un resultado armonioso que les llevó horas de confección de uniformes deportivos, diseño y construcción de mamparas, así como coreografías y secuencias deportivas, es siempre entrañable. 

Muy cerca de donde yo miraba y admiraba el evento se encontraban el Sr. gobernador Rolando Zapata y el secretario general de Gobierno, Víctor Caballero Durán, era visible en sus rostros la sorpresa y alegría contagiosa que reinaba en el ambiente. 

La felicitación del gobernador fue un momento significativo para los hombres y mujeres privados de su libertad que han hecho a un lado  la rutina diaria del encierro e intercambiarla por momentos creativos y de comunicación con los otros. La mascota “Cautivo” mantuvo al público involucrado. 

Lo que más me agrada es que año tras  año somos convocados un grupo de observadores, dispuestos a sorprendernos y colaborar con lo necesario. 

Me llena de gusto que el evento abra con una canción creada para ello, compuesta e interpretada por “Nano el Cenzontle”, cantante hip hopero que hace unos años pagó su deuda con la sociedad y fue tras las rejas que empezó a componer y hasta grabó un disco en el Cereso. 

Nano es un cantante carismático, más allá de su sorprendente talento -basta con que pise el escenario para generar una presencia magnética-. 

Admiro su sencillez, su dedicación a la música y su capacidad empática que le hace recordar los tiempos difíciles para regresar una vez más, pero en esta ocasión con música nueva. 

¿Hay mayor libertad posible? Internos e internas fueron libres una larga mañana, en la que hasta el inclemente sol pareció estar de su lado. 

Estas iniciativas merecen todo el reconocimiento, pues todos tenemos derecho a olvidarnos de los errores cometidos y disfrutar la música, la disciplina y el divertimento, sea cual sea el pretexto que convoque. 

Hay gente que no está de acuerdo con que los reos tengan buenos momentos en la cárcel. 

Es una postura, yo creo que lo reprobable es el hecho que cometió un ser humano y no el ser humano en sí, que sin duda se vio envuelto en mil circunstancias. 

Agradezco mucho la experiencia y espero que el profesor Brito siga haciendo deporte y cultura en el Cereso, acceder a la reinserción social a través de ello no es una utopía, es una realidad de la que he sido y espero seguir siendo testigo.

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