Un cadáver llamado PRI-DF

Ahora, después de 15 años, un Presidente de la República priista, Peña Nieto, tiene como prioridad política recuperar la mayoría en la Cámara de Diputados.

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La soledad es su única compañera. Florestán

El Partido Revolucionario Institucional, como tal, nunca tuvo vida propia en la Ciudad de México y operaba como un espejo de la relación jefe del Ejecutivo-Departamento del Distrito Federal, como un apéndice de su Comité Ejecutivo Nacional.

No obstante esa relación de regencia durante los largos años del primer priato, tenía la presencia que le daba el reflector mayor del que era su sombra e instrumento.

El primer proceso electoral para el gobierno de la Ciudad de México, en 1997, lo dimensionó al echarlo a competir, lo que no sabía, nunca lo había hecho, y perdió todo: jefatura de Gobierno, todos los diputados locales y los federales. De todas, perdió todas.

Parecía que no podía perder más hasta que llegó el proceso de 2000, en el que volvió a perder todo: gobierno de la ciudad, todos los diputados locales, federales y los cuatro senadores y las l6 delegaciones.

La historia se repitió en las cuatro elecciones siguientes: 2003, 2006, 2009 y 2012. El corazón del Distrito Federal latía a la izquierda y si bien el PRI nacional se reinventó y ganó la Presidencia con Enrique Peña Nieto, en la capital del país volvió a ser arrasado, ganando alguna delegación, alguna diputación local.

Ahora, después de 15 años, un Presidente de la República priista, Peña Nieto, tiene como prioridad política recuperar la mayoría en la Cámara de Diputados, en las elecciones de junio de 2015, lo que pasa por el Distrito Federal.

Pero con ese partido capitalino no veía cómo, no al menos hasta que se documentó la clase de sujeto que lo presidía, Cuauhtémoc Gutiérrez, cuya caída la oposición ve como una victoria, cuando, en realidad, también opera para el proyecto presidencial de recuperar la mayoría legislativa perdida en el lejano 1997.

En política, luego no saben para quién trabajan.

retales

1. Instituciones. Andrés Manuel López Obrador irá al mismo Senado que mandó cercar el año pasado para impedir la reforma energética, a fin de tramitar su propia consulta energética. El martes estuvo en la Corte, que hace dos semanas había desechado la petición del PRD, indicándole el procedimiento correcto;

2. Secundarias. El Senado aprobará esta semana las reformas política y de competencia económica. En Pascua desahogarán la de telecomunicaciones, para tenerla aprobada por los diputados en este periodo ordinario. En el tema energético están por decidir la cámara de origen, para que la revisora la resuelva en un periodo extraordinario; y

3. Choque. El diputado Héctor Larios ha roto con el senador Roberto Gil, ambos panistas, por la descalificación que éste hizo de aquél, dándole trato de tonto e incapaz. Es marcada la división de los senadores azules, pero también la que tienen con los diputados de su partido.

Nos vemos mañana, pero en privado.

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