Hoy vamos a hablar de un tema que ha sido el del momento: ¿qué sucedió con el huracán PATRICIA en el Pacífico? La pregunta es: ¿por qué razón si era considerado como el peor huracán formado de los últimos tiempos y con potencial de causar catástrofes no las provocó?

Hay una respuesta a esta pregunta que flota en el ambiente y que ha dejado  a más de uno con la duda. Empecemos por el principio: en efecto el huracán PATRICIA ha sido el peor huracán registrado por la Organización Meteorológica Mundial, al menos para la zona nororiental a donde pertenece al Pacífico mexicano y sólo comparable con el terrible huracán HAIYAN que en 2013 golpeó y le causó graves daños a Filipinas, donde dejó la terrible cifra de más de 6,000 muertos. 

También se ha comentado que ha sido el peor huracán a nivel mundial, y sí lo es en vientos sostenidos, con 325 km/h, medición hecha con un instrumento meteorológico, cosa que en el pasado las mediciones de los huracanes eran estimadas con base en las estructuras que destruían; PATRICIA con sus vientos sostenidos de 325 km/h y rachas aún mayores y un ancho de casi 1,000 kilómetros, se dirigió la noche del 23 de octubre hacia algún punto de la costa de Jalisco.

Este huracán sí era intenso, pero su radio de afectación era restringido o sea sus vientos de 325 km/h sólo alcanzaban a 15 km de distancia de su centro, los vientos huracanados 50 km de distancia y los de fuerza de tormenta tropical 270 km de distancia y al ingresar a tierra estas afectaciones se redujeron enormemente y dio la suerte de que la zona donde ingresó y por las que pasó no eran muy pobladas; sí provocó daños definitivamente, pero fue solamente a zonas muy restringidas y no afectó grandes manchas urbanas, por lo tanto da la impresión de que casi no afectó más que a zonas muy pequeñas y muy puntuales y aparte de todo esto aceleró su movimiento de traslación y el tiempo de afectación se redujo de 12 horas a 5 ó 7 horas, contribuyendo con eso también a causar menos afectación por lluvias.