Un aviso ciudadano a tiempo

A ti, embozado anarco, te lo decimos muy claro: No descargues tu ira en contra de nosotros... estaremos prestos a la defensa y tomaremos la iniciativa.

|
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Si nos provocas encontrarás al pacífico ciudadano frente a frente. La única diferencia será nuestro rostro, decidido a marcarte el alto cuando pretendas alterar a tu arbitrio la casa y país que nos cobija.

No como los cobardes responsables de guardar el orden que te temen y solapan. Espero te desenmas cares para verte a satisfacción cuando nos echemos el tiro. 

Del mismo modo que destruyes lo ajeno, estamos prestos a garantizar vida y sustento. 

No te tememos. Aquí mismo, sin máscara. Mejor fíjate con quién te metes.

A ti, oscuro ente forrado de casco y víscera, bastón, escudo, pistola y botas galácticas, tan negro como las órdenes que recibes, te hacemos saber: 

No permitiremos descargues nunca más tu inculto enojo en nuestra persona. Sin tanto aspaviento ni coraza te prevenimos: si intentas maltratarnos vas a encontrar respuesta. No seremos excusa para exhibir tu desadaptada existencia al  tiempo de golpearnos en la cabeza con tu casco o aplicar tu tolete en las costillas. 

Mucho menos tu docilidad al acatar órdenes superiores que incitan a vulnerar a pacíficos ciudadanos. Cuando pretendas violentarnos la única diferencia entre nosotros −si la excesiva 

parafernalia te deja ver− serán cara, ojos y alma con el manifiesto mensaje de que tu impunidad será repelida contundentemente. Impediremos nos rompas la madre, aísles en separos o calabozos porque se le pega la gana a tu jefe.

La próxima vez mejor te fijas con quién te metes.

Se hace urgente ejercitar nuestro derecho a protegernos y repeler las embestidas de infelices que se ensañan con niños, hombres y mujeres inocentes. 

Enrique Peña ha sido muy claro en sus diez puntos: El pacífico ciudadano tendrá que tomar la debida iniciativa para auto preservar la vida y patrimonio cuando las circunstancias así se lo exijan. Es urgente –si nadie atiende el clamor− contar con amparo cuando decidamos frenar el abuso de esos pendejos.

Bien se lee en el Himno Nacional: “Mexicanos al grito de guerra...”.

¡Vaya biem!

Lo más leído

skeleton





skeleton