El claustro de Sor Juana Inés de la Cruz, en la Ciudad de México, sirvió de marco para presentar la Semana de Yucatán en esa capital, en la que por supuesto no dejaron de estar presentes  diversos actores políticos.

Al recinto llegó muy temprano el titular de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (Sedatu), Jorge Carlos Ramírez Marín, quien en la puerta esperó la llegada del gobernador Rolando Zapata Bello, quien arribó con su esposa, Sarita Blancarte, y el secretario de Fomento Agropecuario, Felipe Cervera. 

Antes de pasar a la explanada el gobernante se acercó a saludar a Jesús Rivero, vocero de la ex gobernadora Ivonne Ortega, quien no asistió al evento. 

Entre los funcionarios yucatecos estaban el senador Emilio Gamboa Patrón, Virgilio Daniel Méndez Bazán, subsecretario de la Defensa Nacional, y Francisco Rojas, director de la CFE. 

Luego se unió al grupo la secretaria de Turismo, Claudia Ruiz Massieu Salinas, quien saludó con efusividad a los anfitriones. La funcionaria federal portaba un terno que le presumió al gobernador y le recordó que fue su esposa la que se lo obsequió. La mayoría de  los invitados vestía de guayabera blanca ellos y ellas del tradicional terno.

Quien se llevó la noche y la convirtió en inolvidable fue el compositor don Armando Manzanero, quien expresó su orgullo de ser yucateco y solicitó a las autoridades que sigan realizando este tipo de eventos. Mientras se escuchaba la canción “Nada personal”, del yucateco, aprovechó Emiliano Salinas para saludar al gobernador en la mesa donde también estaba el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Luis Saidén.

Muy juntas se vio a la exregidora Mimisol Argáez de Sobrino y a la directora del Instituto de Equidad de Género, Rosario Cetina, con quien aquélla platicaba.

Ahí estuvo también el alcalde de Mérida Renán Barrera Concha, quien al ir a saludar a los invitados quedó por momentos a escasos centímetros de la senadora Angélica Araujo, quien degustaba una sopa de lima y no llevó terno, pero sí fue ataviada con un vestido negro con flores bordadas, al parecer de la marca Ibonica. A la senadora Araujo le habían asignado un lugar donde estaba Renán Barrera, pero cuando se enteró pidió que le cambien de asiento. Quien sí se acercó a conversar con el alcalde fue el director de la Comey, Pablo Gamboa Miner, y le dijo: “Acuérdese que Mérida es de todos”.

También observamos a los diputados federales Carmen Ordaz de Blanco, Wíllian Sosa y Marco Vela (no fue Guadalupe Ortega); el senador Daniel Ávila se dejaba querer por el gobernador Zapata Bello. Los diputados locales llegaron tarde a la cena, las legisladoras fueron de terno como pedía la invitación: Leandra Moguel, Elsy Sarabia, Flor Castillo, Pedro Oxté, Fernando Romero, Gonzalo Escalante, Rafael Chan, Alvar Rubio y el líder Luis Hevia. No fue Jorge Sobrino, quien está preparando su arribo al Comité Municipal del PRI en Mérida; tampoco fue Panchito Torres, quien anda muy ocupado llevando gente a Quintana Roo.