Gustavo Villegas/SIPSE
COZUMEL, Q. Roo.- El tiradero de basura clausurado hace algún tiempo e incendiado el mes pasado, a la fecha todavía presenta fumarolas; la dirección de Ecología colocó un aviso para impedir que se utilice para dejar basura a lo largo del camino o en el sitio clausurado. Tampoco hay vigilancia en el lugar, según se pudo observar y la maquinaria que operaba durante la contingencia ya no se encuentra en el lugar.

El director de Ecología municipal, Francisco Chan Chablé, dijo al respecto que se acude a realizar visitas de inspección y alertar que el fuego se mantenga bajo control. Las fumarolas que aún se observan se deben a que hay basura quemándose pero se remueve ocasionalmente para sofocarlo.

Agregó que con las guardarrayas elaboradas para encerrar el fuego se evita su propagación hacia la vegetación circundante y el resto del tiradero que se mantiene intacto de la afectación del fuego. Cuando se presentó la emergencia, fue atendido por el cuerpo de bomberos, protección civil, incluso la Comisión Nacional Forestal estuvo trabajado para evitar que el fuego pase a dañar la flora que hay alrededor.

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Para evitar cualquier situación anómala, dijo que se colocó un aviso a la entrada y orilla de carretera para evitar el ingreso de personas y desechos. Se aplica el reglamento y habría castigo para quien sea descubierto infringiendo el reglamento en materia de recolección de basura y disposición de estos desechos.

Ese tiradero ya está clausurado y se dejó de utilizar hace poco más de tres años, pero aún no se hace el saneamiento por la falta de recursos.

Con la vigilancia que se mantiene, dijo que será suficiente para evitar que resurja y al mismo tiempo mantenerlo bajo control, hasta que se consuma en su totalidad.

El tiradero está a unos 9 kilómetros de distancia de la cabecera municipal, sobre la carreta Tulum-Cobá y un par de kilómetros hacia el poniente. No afecta a los pobladores como está actualmente, señaló. Ocupa cerca de ocho hectáreas y estimó que una tercera parte es la que se vio afectada por el fuego el mes pasado.