Avión solar tomará unos meses de descanso

Sufrió averías irreversibles en las baterías al descender en climas cálidos, lo cual no fue planificado correctamente.

|
El avión Solar Impulse está siendo revisado de manera integral en Hawai, desde donde volverá a despegar hasta abril de 2016. (AP)
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram
Compartir noticia en twitter
Compartir noticia en facebook
Compartir noticia por whatsapp
Compartir noticia por Telegram

Agencias
HONOLULU, Hawai.- El avión Solar Impulse tomará un descanso obligado en Hawai hasta abril de 2016, para la reparación de sus baterías solares dañadas durante la etapa más larga y difícil -sobre el Océano Pacífico- de su recorrido alrededor del mundo.

El equipo del proyecto Solar Impulse, formado por los pilotos suizos Bertrand Piccard y André Borschberg, se quedará en Hawai aplazando hasta la próxima primavera el ambicioso viaje que inició en Abu Dhabi en marzo pasado.

Durante el vuelo entre Nagoya, Japón, y Hawai, que duró cinco días y sus noches para un total de 117 horas y 52 minutos, algunas de las 17 mil celdas solares que la aeronave lleva en sus largas alas -72 metros- se sobrecalentaron, informa Notimex.

Una vez que Solar Impulse aterrizó en el aeropuerto de Kalaeola, al oeste de Honolulu, en la Isla de Oahu, a principios de este mes, se llevó a cabo una revisión integral.

“Después de comprobar lo que sucedió, llegamos a la conclusión de que hemos preferido cambiar estas baterías antes de ir más lejos en el vuelo alrededor del mundo”, informó Borschberg en declaraciones a la prensa hawaiana.

Sobrecalentamiento

Precisó que “no es tan simple como cambiar las baterías de un coche, es un poco más complejo y requerirá más tiempo” y admitió que esta demora podría impedir que sean capaces de cruzar la segunda parte del Pacífico, hacia Phoenix, por las condiciones de la temporada.

Explicó que en los meses siguientes, los días serán más cortos y las noches más largas, lo cual es más difícil para un avión que utiliza energía solar, por ello equipo y avión permanecerán en Hawai durante el otoño y el invierno.

Durante el primer ascenso en el primer día del viaje de Nagoya a Hawai, la temperatura de las baterías aumentó y aunque el equipo del proyecto monitoreaba de cerca el vuelo, no había manera de disminuir la temperatura.

Cada ciclo diario de vuelo requiere un ascenso a 28 mil pies y luego descender para una gestión óptima de la energía.

Daños irreversibles

En general, el avión voló muy bien, afirmó Borschberg y señaló que el daño a las baterías no es por fallo técnico o tecnológico, sino un error de evaluación en términos del perfil de la misión y las especificaciones de diseño de refrigeración de las baterías.

La temperatura de las baterías al ascender y descender en climas tropicales “no se anticipó correctamente”, admitió e indicó que se produjeron daños irreversibles en ciertas partes de las baterías y su reparación llevará varios meses.

En paralelo, el equipo de ingenieros de Solar Impulse estudia varias opciones para mejorar los procesos de refrigeración y calefacción durante vuelos largos, de acuerdo con reportes del periódico Hawaii Star.

La misión de alrededor del mundo se reanudará a principios de abril desde Hawai hacia Phoenix, oeste de Estados Unidos, y desde allí cruzará hasta Nueva York antes de su travesía por el Océano Atlántico a Europa y luego regresar a su punto de partida en Abu Dhabi.

Lo más leído

skeleton





skeleton