Milenio 
MÉXICO, D.F.- En el presente artículo, Antulio Sánchez expone el proceso de cambio que han experimentado los blogs desde que nacieron como weblogs hasta nuestros días.

En abril de 1997, Dave Winer dio a conocer el primer weblog, Scripting News, que se volvió un término muy popular dos años después cuando Peter Merholz suprimió “we” de la palabra weblog. A partir de ese momento se popularizó y bloguear se volvió un verbo. Con la aparición de Blogger, en 1999, los blogs alcanzaron notoriedad en la red.

Ejemplo de su auge fue el blog de Salam Pax, (dear_raed.blogspot.com), en plena guerra iraquí, en 2004, que fue una bocanada de aire fresco sobre los acontecimientos bélicos que se vivían en esa zona. En esa guerra, los blogs se convirtieron en una alternativa informativa a las grandes cadenas noticiosas. Pero, en marzo de 2006, apareció el servicio de microbloguin Twitter, que preludió la pérdida de influencia de los blogs en el planeta digital.

Desde hace más de una década se viene planteando si los blogs se están muriendo, si muchos de los que perviven lo hacen porque tienen un peso específico, si su influencia en la política es prácticamente nula y si han dejado de ser una alternativa de comunicación...

El problema fue tal vez suponer o depositar en los blogs un ideal de emancipación humana, heredado de la Ilustración, pero que no corresponde a la era digital. Hay que entender que los blogs no nacieron para eso. En un blog el contenido no es un criterio suficiente para su valoración y muchos de los temas que se tratan en dichos espacios se encuentran también en los medios de comunicación tradicionales. Los blogs surgieron para satisfacer la necesidad de interacción social, son un canal para expresar pensamientos, sentimientos y opiniones.

Quienes refieren que no tiene sentido celebrar el BlogDay porque los usuarios de internet en la actualidad no lo tienen como un espacio de interés destacado, se olvidan de que la pérdida de visibilidad de los blogs en los últimos años se debe a las emergentes prácticas culturales que están dispersas en los diferentes sustratos que conforman la web, en particular en las redes sociales (como YouTube, que está celebrando un aniversario más).

Pero tampoco debe soslayarse que los blogs, si bien dejaron de ser un vehículo acelerado de globalización, para un porcentaje significativo de personas todavía son una dimensión para incrementar sus interacciones y socializar sus puntos de vista.

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