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ESTADOS UNIDOS.- La Inteligencia Artificial es cada vez más avanzada, algo que seguramente causaría las delicias de Isaac Asimov. Los robots mejoran y también los transportes y, cómo no, la arquitectura urbana. Por ejemplo, los proyectos para construir las ciudades conectadas se multiplican como setas.

Hace apenas unas semanas Google desveló el aspecto que tendría el barrio que ya está construyendo en Canadá. Ahora es Bill Gates, propietario de Microsoft, quien ha anunciado su idea de construir su propia ciudad futurista. En este caso se hará en Arizona, en unos terrenos que Gates ya ha adquirido por la módica suma de 80 millones de dólares, informó el portal Computer Hoy.

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En las aproximadamente 10 hectáreas de terreno adquiridas por este filántropo millonario tendrán que convivir cientos de miles de personas. Son 80 mil hogares los que Gates planea que tendrá su ciudad del futuro, llamada Belmont.

Evidentemente, la tecnología tendrá mucho que decir en esta ciudad conectada. Para empezar, todos los vehículos serán autónomos, al igual que los nudos de transporte y distribución de mercancías, pensados no sólo para que los procesos sean más eficientes en tiempo sino también en emisiones de gases contaminantes.

Al igual que en la ciudad futurista de Google, Bill Gates quiere reducir al mínimo el impacto de su proyecto sobre el medio ambiente. La idea es que Belmont sea todo lo sostenible que sea posible, se presupone con uso intensivo de energías renovables como la fotovoltaica, transporte público, carriles bici y otras formas de transporte no contaminantes.

Además, como ha demostrado de forma suficiente la literatura científica al respecto, la mejor forma de reducir la contaminación es que los trabajadores vivan cerca de su trabajo. Es algo en lo que indicen todos los proyectos de este tipo y en lo que cada vez más ciudades -de las tradicionales- hacen hincapié en sus rediseños urbanos.