Patricia Itzá/SIPSE
MÉRIDA, Yucatán.- El Instituto para el Desarrollo de la Cultura Maya del Estado de Yucatán (Indemaya) en el 2016 registro 602 médicos tradicionales, 94 más que en el 2015, sin embargo a pesar de que se van descubriendo que existen más personas dedicadas a esta actividad, la longevidad de las personas es una de las principales amenazas para que no se continúe.

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Gerardo Arceo Martínez, Jefe del Departamento de Atención y Gestoría, explicó que es lamentable que dentro de unos años más la sabiduría de estas personas se pierda debido a que no existe el interés de las nuevas generaciones en aprender estas técnicas ya que más del 80 por ciento de las personas registradas tienen más de 60 años .

“Esta es una situación que nos preocupa, se ha tratado de hacer una escuela de médicos tradicionales, sin embargo, el mantenimiento de ella sale de nuestro presupuesto, al ser la dependencia que proporcione los gastos de viaje de las personas ya que la mayoría de las personas viven en comunidades apartadas, además el pago del o los instructores, renta del lugar entre otras cosas; situación por la que el proyecto no se ha concretado debido a los recursos que se necesita” explicó.

También una de las situaciones es el encarecimiento de la vida actualmente, por lo que pocos optan esta actividad como una forma de vida ya que actualmente no es redituable para mantener una familia; de igual manera la tecnología está ganando terreno al interés de la población joven en los municipios.

“Ahora con la era digital los niños, adolescentes prefieren dedicarle más tiempo a los aparatos como celulares, tabletas entre otras cosas, en vez de interesarse por lo que puedan aprender de sus abuelos, oficio que se empieza instruirse desde pequeño” explicó.

De igual manera dijo que otro de los puntos en contra pero ya en menor medida, es el “celo” con que los médicos tradicionales guardan todo su conocimiento, en donde muchos no acceden a transmitirlos si no es algún familiar por más que otras personas estén interesadas por ello.

El registro de estas persona empezó desde el 2013 con un plan piloto en 20 municipios, posterior a ello se estableció formalmente el censo y fue en el 2015 cuando se organizó comité que los apoya en realizar sus actividades, interviniendo en él, el Cicy, Semarnat, Prospera, Seduma, IMSS, CDI entre otras.

Los médicos tradicionales se ubican por todo el estado principalmente en comunidades apartadas en donde se tiene poco acceso a los servicios de salud, y al ser personas dedicadas a ello durante gran parte de su vida se les tiene confianza a sus recetas.

Uno de los procedimientos que se siguen para el registro de estos es asistir a las comunidades y dirigirse con el presidente municipal o comisario para que indique si se cuenta con una personas dedicada a la medicina tradicional, por lo que al indicar en donde vive se le visa para que realicen el cuestionamiento constatando que todo lo practicado sea de manera efectiva y desde la antigüedad.