Juan Palma/SIPSE
CHETUMAL, Q.Roo.- Integrantes de la organización “Pro-defensa del Pueblo” de la localidad de Subteniente López, se reunirían este martes con el secretario de gobierno, Gabriel Mendicuti Loria, para informarle sobre la afectación causada al reducido sector comercial con la apertura del nuevo puente internacional de Subteniente López. De la misma forma, plantearan la posibilidad de habilitar nuevamente el flujo vehicular en el antiguo paso fronterizo a fin de evitar más afectaciones a la economía del poblado.

Carlos Zapata Kantún, propietario de una lonchería y uno de los principales promotores de la organización “Pro defensa del Pueblo”, comentó que días después de la apertura del nuevo puente Chactemal, enviaron un escrito al gobernador del estado, Roberto Borge Angulo, firmando por aproximadamente 500 habitantes de esta población, donde plasman la crítica situación por la que atraviesa Subteniente López.

Adicionalmente, solicitaron una audiencia al Secretario de Gobierno, Gabriel Mendicuti Loria, para pedirle su intervención y hacerle llegar la inconformidad de los pobladores de la localidad de Subteniente López, a las autoridades federales relacionadas con este tema.

Al respecto, Mendicuti Loría, confirmó que el Gobierno del Estado actuará como “mediador” para hacer llegar esta petición a las autoridades federales involucradas en el tema, como es el caso de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y de la dirección general de Aduanas.

“Ellos argumentan que el nuevo puente los ha afectado en su economía, llámese taxis, moto taxis, comercios que están ubicados en esa zona fronteriza con Belice, nosotros fungiremos como mediador para hacer llegar su inquietud a las autoridades federales y poder concretar una reunión con ellos para que la externen de manera directa”, explicó.

Esta agrupación dijo, pide que tanto la SCT como la dirección general de Aduanas, reconsideren la posibilidad de que el puente antiguo vuelva a tener el funcionamiento que tenía anteriormente, pues una población de dos mil 500 personas dependen en gran medida de la actividad comercial que se perdió con la apertura de la nueva vía terrestre.