Excesos de Félix en Dubái, con cargo al erario
El exgobernador de Quintana Roo intercambió ‘favores’ con empresarios para hacer el costoso viaje.
César Muñoz/SIPSE
CANCÚN, Q. Roo.- Félix González Canto viajó del 18 al 21 de septiembre de 2006 a Dubái, con una caravana de acompañantes, entre los que figuraban el director en ese entonces de la Oficina de Visitantes y Convenciones (OVC), Jesús Almaguer Salazar, y el alcalde de Benito Juárez en ese momento, Francisco Alor Quezada.
El gobernador fue al World Routes 2006, y aprovechó no sólo para tratar de restablecer vuelos a Cancún y buscar la sede de ese evento para el destino en el Caribe Mexicano, sino para darse vida de rico a costa del erario de Quintana Roo, y de paso, proyectar la inversión de un condominio de lujo en el Hutton Grand, con un prestanombres a través de una empresa de Monterrey, Nuevo León.
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El viaje fue realizado por el exgobernador de Quintana Roo en un avión que le prestó el empresario Pedro Pueyo, de Grupo Oasis. El gobierno de González Canto canjeó el viaje por el pago de los prediales del consorcio.
En Dubái, el ahora senador y sus acompañantes, reservaron suites de lujo en el hotel Burj Al Arab. González Canto se hospedó, solo, en la suite 1211, y sus gastos por tres días fueron de 56 mil 42.25 dólares, independientes al de sus acompañantes. En 2006, el dólar se cotizaba en $10.90. El total de gasto con cargo al erario fue de $610,860.52 (seiscientos diez mil ochocientos sesenta pesos 52/100). Estos gastos fueron pagados con la tarjera American Express con terminación 1023, mismos que después le fueron reembolsados al exgobernador de las arcas públicas.
La comitiva quintanarroense viajó por Dubái en dos lujosos autos Bentley, con chofer a la puerta, proporcionados en renta por el lujoso centro de hospedaje. El día 19, el servicio fue de 600 dólares ($6,540.00) y el 20 de septiembre, 800 dólares ($8,720.00).
Un gasto que no está documentado fue el alquiler de un yate de lujo, que utilizó González Canto con sus amigos para recorrer aguas del Golfo Pérsico.
El condominio árabe
El edificio Hutton Grand está en el corazón de Dubái, el emirato que cautivó al senador González Canto. En una réplica que envió el legislador a un periódico electrónico, niega tener propiedad alguna y en efecto, no la tiene a su nombre, pero sí bajo el de una empresa regiomontana que hizo la operación de compra para él.
Aun siendo gobernador de Quintana Roo, González Canto encargó la compra del condominio árabe a Felipe Enríquez Hernández, el mismo que coordinó la logística financiera de la campaña de Roberto Borge, según documentó el periódico digital Animal Político en enero de 2011. Ese mismo diario indica que Enríquez Hernández se convirtió de la noche a la mañana en empresario inmobiliario y nuevo rico.
En el sexenio de González Canto (2005-2011), Enríquez Hernández se hizo de 19 hectáreas en Punta Blanca (en 2009), en la zona continental de Isla Mujeres, a través de la empresa GLS-4 Corporativo, S.A. de C.V., según documenta Animal Político.