Mérida, Yuc.- A pesar de que de enero a junio de este año la recaudación por el Impuesto Especial sobre Producción y Servicio (IEPS) en bebidas saborizadas cayó 4.9% en términos reales en comparación con lo obtenido en el mismo periodo de 2016, aún es discutible que esta medida haya tenido efectividad contra la epidemia de obesidad y diabetes que prevalece en México actualmente.
De acuerdo con la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición 2012, Yucatán es uno de los estados del país en donde más refrescos embotellados se consumen al año, con un aproximado de 660 porciones de 8 onzas de refresco de cola, que equivalen a 1.8 botellas diarias (430 mililitros), los que representa 156.9 litros de refresco al año.
En zonas rurales, el consumo de refrescos llega incluso a superar al consumo de leche, huevo, carne, frutas y verduras.
Recaudación
Luis Miguel Estrada Figueroa, especialista en Medicina Interna de la Clínica Santiago, comentó que algunas personas consumen de dos a tres litros de refresco embotellado por día.
Cifras del Servicio de Administración Tributaria (SAT) muestran que por el gravamen a las bebidas saborizadas se 11,757 millones de pesos en el primer semestre del año, mientras que en el mismo periodo de 2016 se recaudó 12,364 millones de pesos.
Especialistas consideran que esto se debe en parte a la serie de comerciales que refieren a los problemas de salud que traen este tipo de bebidas y, segundo, el encarecimiento que han tenido otros productos, que deja menor capacidad para la compra de bebidas saborizadas a las familias.